El presidente del ente rector, Narciso Velázquez, explicó a ÚH que, además, no se pudo sustentar que los certificados de estudios expedidos por la UPMS hayan cumplido con los requisitos académicos, sobre todo en cuestión de pasantías y correlación de materias. “La universidad cuando se le requirió los informes en algunos casos, incluso se negaron a dar”, señaló.
La intervención comenzó con una denuncia concreta sobre la falsificación de certificados de estudios y a partir de eso la intervención hizo el recorrido de lo que, al parecer, hacían los alumnos.
“Hay estudiantes que comienzan en la filial de Ciudad del Este y concluyen (la carrera) en un trámite administrativo en la sede central”, refirió Velázquez.
Comentó que funcionarios de la universidad refirieron que eran nuevos, por lo que las explicaciones no fueron coherentes. “Cuando se les pide explicación a los directivos tampoco dan respuestas consistentes de todo este proceso”, indicó.
En estos nueve meses de intervención llegaron a corroborar “algunos hechos bastantes graves” como la expedición de títulos o certificado de estudios de haber completado todo el proceso, pero sin respaldo. “El haber hecho una práctica o pasantías en tal o cual hospital, recurriendo a esos establecimientos solicitando esos informes, los centros asistenciales dicen no tener el registro de esos estudiantes”, señaló.
Directamente los centros hospitalarios “negaron que esos estudiantes” hayan pasado por ahí, según el titular del Cones, y en algunos casos “negaron tener convenio con esa universidad”.
Por lo que en el dossier de María Serrana figuran documentos respaldatorios como conclusión del hecho académico, pero de contenido falso. “El certificado de estudio tiene que tener un respaldo como son las libretas de prácticas y aparecen esas libretas supuestamente de esos lugares, pero no son reales. El informe que pasa la universidad no es completo. Porque cuando no tiene el respaldo no existe la práctica que dicen haber tenido”, expuso Velázquez.
A su vez, hay algunos hospitales con los que la UPMS dice que sí tienen convenios. Así pidieron los antecedentes a quienes hicieron de tutores “y ellos niegan haber hecho la práctica de estudiantes; pero que sí ellos recibieron la remuneración. En un caso, se comprobó la remuneración, se obtuvo una factura expedida por un médico que dice ‘en agradecimiento a la Universidad María Serrana’”, tiró.
Según el Cones, María Serrana, en principio, hablaba de que tenían 4.500 a 5.000 estudiantes y, últimamente, dice que tienen 1.500, atribuida a la estampida que se produjo por la intervención.
El ente rector ahora espera que los estudiantes afectados que quieran reclamar, en el sentido de si fueron engañados en su buena fe. “Ahí vamos a saber quiénes firmaron los certificados de estudios y pedir los respaldos académicos”, dijo.
Desde la Agencia Nacional de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior (Aneaes) anticiparon que el proceso de acreditación de ambas carreras se cancelará. “Es una fuerte medida, una vez que nos comuniquen, el proceso se cancela y queda sin efecto”, indicó el Dr. Raúl Aguilera, directivo de la Aneaes.
Los hospitales negaron que esos estudiantes hayan pasado por ahí y negaron tener convenio con esa universidad.
Narciso Velázquez
presidente del Cones
educación superior bajo lupa