Colmenares, de 65 años, fue hallado sin vida el pasado sábado 17, en el lugar donde se hospedaba en Encarnación, la capital del Departamento de Itapúa, en la frontera con Argentina.
El acordeonista se preparaba para comenzar en la noche del sábado una gira de conciertos que lo llevaría también durante los próximos dos meses a Argentina y Brasil, dijo a Efe el director general de la empresa Jaguareté Producciones, Fredon Alonzo.
“Fue muerte súbita, él falleció dormido”, agregó el empresario, quien describió al artista como un “hombre muy alegre, muy simpático”.
Además, indicó que el cuerpo del músico, nacido en la ciudad colombiana de Bucaramanga, fue trasladado el mismo sábado por vía terrestre hasta la capital paraguaya, distante a unos 350 km de Encarnación.
Se espera la llegada de su hijo y de un hermano a Paraguay para cumplir los trámites para el traslado a su país.
El cuerpo del músico fue llevado inicialmente a la sede del Grupo San Jorge, de Encarnación, y de ahí a una funeraria en Asunción.
El artista es recordado por los éxitos El santo cachón y Se le moja la canoa, que catapultaron a la fama al conjunto musical Los Embajadores Vallenatos, que Colmenares creó junto al vocalista Robinson Damián.
Llegó a Paraguay junto al cantante David Cuadros y al mánager Abimael Iguarán, del conjunto vallenato La Gente de Pedro Muriel. EFE