24 jun. 2025

Cooperativa Neuland dona títulos de propiedad y tractor a indígenas Nivaclé

Por Darío Lugo

Títulos de tierra.  Calderón suscribe junto con Reimer, presidente de Cooperativa Neuland.

Títulos de tierra. Calderón suscribe junto con Reimer, presidente de Cooperativa Neuland.

dlugo@uhora.com.py

Ochenta familias indígenas nivaclés fueron beneficiadas con la entrega de la escritura del título de sus terrenos en la comunidad El Paraíso, cercana a Neuland (centro del Chaco paraguayo), en un espacio de 4.723 hectáreas, además de un tractor e implementos agrícolas, gracias a gestiones realizadas por la cooperativa Neuland y la Asociación de Colonias Indígenas Menonitas (Ascim).

En el acto de entrega, realizado recientemente, se dieron cita autoridades de las organizaciones nombradas, de la Gobernación y del Rotary Club, oportunidad en que los 297 habitantes nativos vieron coronado el sueño de contar con dos hectáreas propias para cada familia, con el fin de dedicarse a la agricultura.

De acuerdo con Florentino Calderón, líder de la comunidad El Paraíso, también se realizó la entrega en donación de un tractor y sus implementos agrícolas, para ablandar la tierra y cultivar. La producción principal del asentamiento, distante a 70 kilómetros de Neuland, es el sésamo, pero también cuentan con 1.000 hectáreas de estancia, donde crían 200 cabezas de vacas y 95 terneros.

El convenio suscripto por los indígenas y responsables de la colonia Neuland data de 2010, año en que comenzó el proyecto para conseguir la titulación de tierras. La instalación de luz eléctrica corrió por cuenta de la cooperativa; Hábitat para la Humanidad se encargó de la construcción de las casas, todas equipadas, pero Calderón se quejó de Senasa, entidad de la que indicó que aún no les cumplió y solo está en proyecto el tajamar y los aljibes necesarios para la zona.

infraestructura. La comunidad El Paraíso tiene en calidad de edificios comunitarios, una escuela, centro de salud, iglesia, sala para reuniones sociales, vivienda para un asesor y aula para clases de capacitación a las mujeres.

También cuenta con una estancia comunitaria en la que los interesados pueden participar en un régimen de trabajo rentado, en que las ganancias son invertidas principalmente en gastos comunitarios, como educación, salud, mejoramiento de caminos, etc., según refirieron autoridades de la cooperativa Neuland.

Según Edwin Reimer, presidente de esta institución, los colonos de la cooperativa donaron animales para el establecimiento ganadero indígena, los indígenas ya lograron vender 65 reses, con una ganancia de G. 260 millones. Asimismo, se dedican a la tala de árboles para leña, destinada a olerías de la zona.