El gremio sindical también acusa del pisoteo de los derechos laborales a los parlamentarios cartistas, a quienes tilda de “politiqueros”, y tampoco se salva la dirigencia sindical de otras centrales obreras, a la que califican de “entreguista”, por apoyar la aprobación de cuatro leyes, a tambor batiente, “que eliminarán derechos fundamentales e históricos de la clase obrera”. La CSC cuestiona la conformación de la Superintendencia de Jubilaciones, que, asegura, privatizará la seguridad social y eliminará el IPS. Además, también repudia la modificación de la Carta Orgánica del IPS, que aumentó de 3 a 10 años el cálculo del promedio de los haberes jubilatorios. Además, cuestionan la Ley de la Función Pública y la Ley de Mipymes, que pisotea derechos laborales fundamentales, como el pago de solo el 80% del salario mínimo legal vigente.