Roberto Irrazábal
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Consultado al respecto, González Quintana recordó una reunión personal que tuvo con Oviedo, entonces candidato a la presidencia de la República por el Partido Unión Nacional de Ciudadanos Éticos (Unace), donde le advirtió del peligro al que se estaba exponiendo en la campaña electoral, ya que, según dijo, tenían muchas amenazas.
“Un mes antes de su muerte, yo tuve una reunión de cuatro horas con él, a nivel de hermano, compañero de lucha y amigo, y yo le había advertido a él de la persecución tenaz que había contra el partido... que el poder fáctico es fuerte y por sobre todo las organizaciones criminales, que son las que hoy imperan... y él me manifestó, mirá Enrique, uno tiene que morir nomás luego en la vida”, relató el ex titular del Congreso.
El mismo confirmó que, en pocas palabras, le estaba advirtiendo de la posibilidad de que grupos criminales atenten contra su vida, a lo que el líder de Unace le respondió que ya no iba a dar vuelta atrás.
“Él me dijo que había jurado a la bandera y que no abandonaría su lucha, y yo le dije que hasta acá me animaba y que temía por mi familia. Le recordé lo que pasó con el doctor Argaña, que a nosotros nos endilgaron su muerte, pero sabemos lo que realmente pasó, por lo que no había garantías para hacer una campaña muy dura como lo estaba haciendo, en la radio y la televisión. Le pedí que no se moleste, pero me entienda, que iba a ser un poco cobarde por mi familia, y él me dijo que iba a continuar su lucha”, detalló.
El ex senador recordó que, en esos tiempos, sus hijos le hablaron y pidieron que no se exponga a peligros, y que fue por eso que le planteó a Lino Oviedo bajar los decibeles en la campaña electoral.
“Siempre recibimos amenazas, sobre todo él (Lino Oviedo), incluso antes del Marzo Paraguayo pasamos situaciones que pocos saben porque nunca se hicieron públicas. Yo le dije a él que mejor aguantemos hasta donde se pueda, hablé bien con él, nos abrazamos y luego él siguió su camino”, indicó.
Un mes después de esa charla, el helicóptero donde viajaba Lino Oviedo, en el marco de su campaña electoral a la presidencia, se estrelló en la estancia La Mocha, en el Departamento de Presidente Hayes.
torturas y BOWER. González Quintana recordó que, luego del asesinato del vicepresidente Luis María Argaña y el Marzo Paraguayo, en 1999, Oviedo huyó del país y él cayó preso, donde recibió torturas que le dejaron secuelas físicas que tiene hasta ahora.
Respecto a la reciente condena de Walter Bower, ex ministro del Interior de ese tiempo, justamente procesado por hechos de tortura, González Quintana dijo que a él le instaron a sumarse a la querella, pero que él rechazó.
Aún así, consideró que la condena a Bower es un acto que demuestra que la justicia tarda, pero llega.
“Es una buena señal, la justicia tarda, pero llega, y la justicia llegó después de 25 años, pero yo adelanto que voy a ir a visitarle... Le voy a llevar una voz de aliento como persona humana”, manifestó.
Expresó que no le desea a nadie lo que a él le pasó cuando sufrió prisión y tortura, y recordó que cuando le ofrecieron querellar a Bower él rechazó señalando que para él no era la forma de cambiar lo que querían cambiar.