Pedro Antonio Mendoza González fue detenido tras un trabajo de inteligencia de agentes de Investigación de Delitos de la Policía de Canindeyú por varias denuncias de robo de animales. Su detención se dio tras una persecución con balacera con agentes policiales. Tres de los ocupantes del vehículo que manejaba Mendoza lograron escapar.
En el vehículo, la Policía encontró 200 kilos de carne vacuna. El dueño del animal presuntamente robado y faenado, Ricardo Ayala, denunció ante la Policía que su buey fue robado de su vivienda.
Cinco días después de su detención, el juez Ramón Alberto Florentín, de Curuguaty, otorgó medidas alternativas al presunto abigeo. La resolución fue dictada el 30 de marzo pasado.
Celso Maidana, de la comisión vecinal de Araujo Cué, donde ocurrió el hecho, llegó hasta el juzgado buscando una explicación a la rápida liberación de una persona que fue detenida con evidencias de un delito y luego de un enfrentamiento con la Policía.
“En aquella ocasión lograron detener a solo uno de los cuatro que iban en el auto, además de toda la carne. Al único detenido le dan arresto porque supuestamente el dueño del animal no presentó los documentos. Eso es mentira, nosotros como comisión hemos presentado todo”, aseguró Maidana.
“Existe una mafia fiscal-judicial que opera favor de los delincuentes. El dueño de este animal quedó prácticamente sin brazo porque el animal era su buey con el que realizaban las labores en la chacra. Esperamos que la Corte Suprema de Justicia o el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados tomen medidas contra los responsables de liberar a este sujeto”, añadió.
Por su parte, el juez Florentín expresó que el dueño del animal no presentó los documentos que lo acreditan como propietario, aunque toda la carne incautada en aquella ocasión fue entregada a su propietario, Ricardo Ayala.
El magistrado recalcó que en la causa no existen los documentos que acrediten que Ricardo Ayala sea el propietario.