Esta cantidad representa un crecimiento muy importante desde agosto de 2018 cuando se tenía solo 70 familias, destacó el viceministro de Protección Integral de la Niñez, Eduardo Escobar Said.
“Estamos avanzando de manera sostenida y fortaleciendo la red de familias de acogida”, destacó.
Uno de los ejes fundamentales del programa es la descentralización de los servicios para facilitar la inscripción de nuevas familias acogedoras en distintas regiones del país. Escobar relató que antes, el acceso estaba concentrado en Asunción y Central.
“Desde el 8 de octubre, implementamos equipos técnicos descentralizados en 13 departamentos adicionales para ampliar la cobertura”.

Estos equipos técnicos están encargados de la captación, evaluación y acreditación de nuevas familias, además de la valoración de casos de niños en situación de vulnerabilidad.
“Nuestra labor incluye la reducción de la brecha en áreas clave, como el mantenimiento del vínculo con la familia de origen, un factor determinante para que el juez pueda tomar decisiones informadas sobre la situación del niño”, detalló.
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Una de las principales metas que tiene el Ministerio de la Niñez y de la Adolescencia (Minna) es la desinstitucionalización de niños que ya pasaron largos períodos en entidades de abrigo.
“Si bien las instituciones de abrigo brindan protección, el entorno familiar es siempre la mejor opción”, apuntó.
Para mejorar la transición, el gobierno está implementado transferencias monetarias dirigidas a estos centros, garantizando mejores condiciones mientras los niños esperan ser integrados a una familia de acogida.
Sin embargo, no todos los niños pueden ser acogidos de inmediato porque “existen casos que requieren un abordaje especializado previo, como los niños con consumo problemático de sustancias o víctimas de trata de personas”, explicó el viceministro, quien destacó la importancia de planes de intervención específicos para cada situación.
Actualmente, hay 150 familias en proceso de evaluación, lo que podría elevar el total de acreditaciones a 450 en las próximas semanas.
“Cada vez más personas se interesan en este programa y estamos avanzando en la validación de estas nuevas solicitudes”, comentó.
En cuanto a la adopción, el viceministro señaló que si bien el número de niños en espera es limitado, los mayores desafíos son la mora judicial y la falta de informes actualizados sobre el mantenimiento del vínculo con la familia biológica.
“El principal problema es la acumulación de casos pendientes en el sistema judicial debido a la demora en la emisión de estos informes”, indicó.
Para agilizar los trámites, el Ministerio de la Niñez trabaja en conjunto con la Corte Suprema de Justicia, la Defensoría Pública y el Ministerio Público.
“Estamos colaborando con diversas instituciones para reducir los cuellos de botella y acelerar la resolución de los casos”, enfatizó Escobar Said.