La población todavía está a tiempo para inmunizarse y con eso tener defensas ante el ingreso de las enfermedades respiratorias propias de la temporada. De acuerdo con el Ministerio de Salud Pública, aún están disponibles las vacunas para prevenir la influenza, el Covid-19 y el neumococo. Es muy importante que las personas entiendan que las vacunas previenen las formas graves de estas afecciones y con ello se puede evitar llegar a precisar internación, en una temporada en la que circulan los virus respiratorios.
Salud informó que ya fueron aplicadas 815.355 dosis contra la influenza; 211.003 contra el Covid-19 y 19.103 del neumococo. La campaña oficial de vacunación prosigue y están disponibles las dosis.
A pesar de que todavía no se ha iniciado oficialmente el invierno, y con él la temporada de frío, se hace evidente que los virus respiratorios ya están presentes entre nosotros y teniendo un alto grado de circulación.
Desde los hospitales se informa que van cada vez más en aumento las consultas, y que, tanto en el caso de niños como de adultos, son por cuadros respiratorios. Además del factor climático, la socialización en las instituciones educativas es un factor gravitante que favorece al contagio de estas enfermedades. En el caso del Ineram, el Instituto de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente e importante centro de referencia, informan que las enfermedades tipo influenza son las más comunes en las consultas, y también se registran una gran cantidad de personas con resfriado común. En los niños menores de dos años se diagnostican casos de virus sincitial respiratorio (VSR) y en el de los adultos, las descompensaciones se registran entre los que padecen la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). A ellos se suman los que padecen de asma y también quienes presentan cuadros de neumonía, que son exacerbados por los virus circulantes en la comunidad.
Por eso, es motivo de preocupación que la población se haya relajado en cuanto a acudir a los vacunatorios para recibir la inmunización, considerando que es evidente el aumento también de las internaciones en el sector pediátrico, y con esto se van ocupando las camas disponibles.
El virus sincitial respiratorio (VSR), causante de bronquiolitis, y el rinovirus, el clásico chillido de pecho, son las enfermedades que más se observan en esta época. La neumonía también es otra amenaza que circula en la temporada de días fríos y causa internaciones.
En uno de los últimos informes del Ministerio de Salud, se había estimado cuándo llegaría el pico de las primeras enfermedades de esta temporada otoño-invierno, y se prevé que el mayor número de casos se darían a finales de mayo. Eso supone el aumento de consultas y también de las internaciones por los cuadros graves.
Por todos estos hechos y con el pleno conocimiento de las limitaciones de la infraestructura de Salud Pública, así como también para evitar una crisis sanitaria como la que vivimos hace muy poco tiempo durante la pandemia del Covid-19, con hospitales colapsados y enfermos internados en los pasillos es que debemos cuidarnos.
La respuesta para evitar una crisis en los servicios de salud es recurrir a nuestra memoria colectiva, y retomar las buenas prácticas aprendidas durante los dos años que duró la terrible pandemia del Covid-19. Se debe recomendar, por tanto, a la población que intensifique el lavado de manos, el uso de tapabocas y las desinfecciones de las superficies como una manera de prevenir o evitar el contagio de las enfermedades de estación. Debemos apostar a la ciencia, las vacunas y los cuidados sanitarios, pues pueden salvar vidas.