AFP
VALPARAÍSO, CHILE
Los pilotos Carlos Sainz, en autos, y el chileno Francisco López, en motos, le colocaron acento español al Rally Dakar 2009, que ayer llegó al puerto chileno de Valparaíso al término de la séptima etapa, en la que ambos triunfaron en los 244 km de especial.
Nacido en Curicó (centro-sur), López, de 34 años, superó en el tramo cronometrado al líder, el español Marc Coma (KTM), en tres minutos 57 segundos (3:57), y al francés Cyril Despres (KTM), campeón en 2005 y 2007, en 5:21, convirtiéndose en la estrella de la jornada ante el público de su país.
“He alcanzado un buen ritmo. Había muchas dunas y ha sido una etapa de mucho desgaste físico. Los pilotos de motos lo vamos a sentir. Luego nos han tocado 120 kilómetros muy difíciles y que exigían un ritmo elevado. Y después, el barro, que desorientaba bastante para el pilotaje”, dijo emocionado López. “Ahora estamos en Chile. Ya veremos qué tal nos va (...) Me gustaría que todo me saliera bien en mi tierra”, agregó.
En la clasificación general, Coma continúa liderando por delante del estadounidense Jonah Street (KTM), a 51:22, y el francés David Frétigné (Yamaha), a 52:31. López (KTM) es ahora décimo a 1:59:31.
En autos, Sainz sacó provecho de los 7:48 que perdió su compañero de equipo, el sudafricano Giniel De Villiers, sobre las estribaciones de la cordillera de los Andes, para asegurarse la victoria y retomar el control de la clasificación general.
El madrileño (Volkswagen) superó en el tramo cronometrado a los estadounidenses Mark Miller (Volkswagen) por 3:41 y a Robby Gordon (Hummer) por 4:13.
“El día ha sido bueno, aunque la etapa ha sido bastante dura, incluso con algunas zonas de barro y charcos, donde se patinaba bastante. Luego una zona de rectas, muy bacheado. Ha sido una etapa difícil, pero todo va bien para el equipo”, manifestó Sainz.
En la clasificación general, Sainz tomó una mínima ventaja de 9 segundos sobre De Villiers, mientras que Miller es tercero a 13:53.
Entretanto, el francés Sté-phane Peterhansel, poseedor del título en autos, abandonó el Dakar 2009 víctima de un problema en el motor de su Mitsubishi, después de experimentar un principio de incendio en su auto antes del tramo especial.
La especial de camiones de la séptima etapa fue cancelada por la organización, debido a las intensas lluvias en la zona y que el jueves provocaron que varios vehículos se quedaran atascados en medio de las dunas.
Los organizadores de la prueba recortaron de 419 a 244 km el tramo cronometrado debido a las dificultades que presentó un cordón de dunas de la etapa previa y el cruce de la cordillera de los Andes,