Para el 7 de agosto estaba fijada la fecha en que Durand y los demás acusados debían comparecer ante la jueza Cynthia Lovera para la audiencia donde se decidiría si la causa va o no a juicio.
En esa fecha, el ex ministro había recusado –aparentemente sin justificación– a las fiscalas Irma Llano, Alba Delvalle y Ruth Benítez, recientemente confirmadas en la causa.
ACUSACIÓN. Según las agentes del Ministerio Público, supuestamente se formó un esquema en el Grupo Mocipar y los directivos incluyeron a sus familiares, para beneficiarse, causando un perjuicio que rondaría los G. 867 millones.
Durand fue acusado junto a su esposa Luz Marina González de Durand, y demás directivos Fernando Román Fernández, Marcela Adriana Durand Martínez, Diana Teresita Britos Ocampo de Román y Favio Arturo Britos Ocampos.
La acusación es por los hechos de estafa, asociación criminal, conducta conducente a la quiebra, conducta indebida en situación de crisis, evasión de aportes a la seguridad social y lesión de confianza.
Fernando Román y el ex ministro estaban al frente del Grupo Mocipar, y allí habrían involucrado a familiares suyos “con roles estructurados, con el fin de obtener beneficios patrimoniales de manera indebida”.
Tras pagos de clientes, y pese a los compromisos de entrega de bienes o productos, estos no se les otorgaba. La Fiscalía habla de 31 víctimas del esquema solo en este caso y hay más de diez causas más.