En octubre pasado, el mandatario promulgó la reprogramación presupuestaria para inyectar G. 3.500 millones a la deficitaria Caja de Jubilaciones de los parlamentarios, y así mantener la denominada jubilación vip, que con el viejo salario, era de G. 23.335.678 para legisladores con tres periodos y G. 17.501.765 con dos periodos.
Para el año próximo, está prevista la misma cantidad de dinero en el Presupuesto General de la Nación (PGN) 2025, lo cual implica que el dinero de los contribuyentes seguirá subsidiando la privilegiada jubilación, que hasta cede un monto de G. 13.109.936 para viudos o viudas de parlamentarios.
Actualmente, son 65 los ex parlamentarios que ya están gozando de dicho privilegio bajo la modalidad de jubilación ordinaria y 63 los que gozan de la extraordinaria.
El aumento de sueldo de G. 32.774.840 a G. 38.774.840 también acarreará a la larga el aumento de las jubilaciones, ya que se calcula con base en los montos de salarios de los últimos 60 meses.
VIAJES Y NEPOBABIES. Los legisladores no solamente acarrean beneficios y privilegios para ellos, sino que también vienen con su manada de parientes y hordas de hurreros que se instalan en la función pública con salarios exorbitantes, sin concursos ni títulos académicos.
Los escándalos provocados por los casos de nepobabies en el Congreso no les molestaron un centímetro ya que siguen sosteniendo sus esquemas de tráfico, y utilizan la propia ley para autonombrarse sujetos de excepción, como el caso de la Ley Godoy, que pisotearon para poder ganar más que el propio presidente de la República.
En el caso del titular del Congreso, Basilio Bachi Núñez, solamente en sus primeros cuatro meses firmó contratos para 455 funcionarios, de los cuales por lo menos unos 117 eran nuevos.
Para el año próximo, el PGN contempla unos G. 30.368 millones para aumento salarial de funcionarios del Congreso y el Senado, así como unos 100 nuevos cargos.
Los viajes y viáticos parlamentarios también son un objeto de abuso y poco provecho, lo cual se vio en el caso del viaje a las elecciones de EEUU, donde los legisladores fueron a pasear en cruceros y otras atracciones turísticas.