Luego del rechazo por parte de la Cámara Alta de los pedidos de pérdidas de investidura de tres de sus miembros, hubo quienes justificaron la polémica decisión de dar un salvataje a los senadores del Partido Colorado, Javier Zacarías Irún y Rodolfo Friedmann; y al luguista, Sixto Pereira, aprovechando la mayoría coyuntural integrada por abdistas, liberales de ambos movimientos, progresistas y luguistas.
El senador luguista Miguel Fulgencio Rodríguez fue uno de los que defendieron a capa y espada el blanqueo y aseguró que el Senado obró bien. Aseguró que quienes los critican responden a una campaña de desprestigio.
“Uno de los que argumentaron estar en contra ayer también votó por la expulsión del senador Paraguayo Cubas, a quien echaron en veinte minutos. Ellos fueron los que nos criticaron”, dijo.
Manifestó que los senadores que se ausentaron en la sesión de ayer eran mayoría y podían debatir y votar en el sentido que consideraban.
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsApp“En segundo lugar, ellos tenían mayoría (los ausentes), entonces, por qué no se presentaron a discutir. Se vio que la mayoría estaba afuera, se retiraron o estaban ausentes de la sesión”, manifestó.
Argumentó que era necesario dar previsibilidad al Senado y tratar los proyectos de pérdidas de investidura. “Estábamos interesados en discutir y tratar esta espada de Damocles sobre el Senado”.
Sumó a la defensa del proceso de blanqueo el hecho de que según su parecer “no existieron argumentos”, en especial en el caso de su compañero de bancada, Sixto Pereira.
“Imagine que se pide la expulsión del senador Sixto Pereira porque dice que se fue a arengar ‘dice que’. Zacarías Irún está desaforado y con un proceso concluido y Rodolfo Friedmann está desaforado y sometido a la justicia. Entonces, cuál lo que es la gracia de que se les expulse”, mencionó.
Para Rodríguez, que votó en bloque junto a sus colegas de izquierda, pese a las críticas “el Senado es la Cámara más pluralista, más participativa y es el bastión de la democracia hoy”.
Voto. La actitud de los aliados, muchos de ellos quienes llevaron a la presidencia del Congreso a Óscar Salomón, fue repudiada por sus colegas que no se prestaron al blanqueo. Quienes protestaron por este procedimiento se desconectaron de la sesión extraordinaria. Zacarías y Friedmann fueron salvados con 19 votos, y Sixto, con 22.
Nosotros sí estábamos interesados en discutir y tratar esta espada de Damocles sobre el Senado.
Miguel F. Rodríguez,
senador del FG.