Víctor Galeano
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El proceso para dejar las drogas no es sencillo, desafía a la voluntad individual del usuario, se necesita de tratamientos interdisciplinarios, abandono de amistades y hasta de la propia vivienda, pero por sobre todo requiere de mucho amor y compromiso familiar.
Se trata de una reseña de la entrevista que nos concedió la sicóloga clínica, Carla Taboada, especialista en sicología familiar y adicciones.
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsAppLa profesional relató que la dificultad para dejar las drogas radica en que las mismas producen una fuerte adicción en la persona por el consumo persistente en el tiempo. Tal hecho produce cambios a nivel cerebral, en su estructura misma, además de alteraciones cerebrales.
Agregó que se modifican los mecanismos que regulan la toma de decisión y de control, en otras palabras, la fuerza de voluntad queda seriamente afectada o incluso anulada y el usuario se dedica, gran parte del tiempo en buscar aplacar su adicción.
¿Qué hacer? Taboada menciona que para dejar las drogas, es necesario un tratamiento interdisciplinario, pero para el efecto es fundamental que la persona tenga ganas y en la conciencia; la seguridad de que la droga le está haciendo mal.
En ese sentido, aconseja como primer paso, recurrir siempre a un sicólogo especialista o un siquiatra, de acuerdo al nivel de adicción. El trabajo lo puede desarrollar una profesional sicóloga o con más profesionales.
En casos más complejos, en los que el trabajo no es tan sencillo, recomienda que la persona sea internada en un centro de adicción, ya que conseguirá apartarse de los desencadenantes que le impulsan a consumir.
“Siempre recomiendo que la familia completa busque ayuda, porque los padres deben aprender también a educar con amor, los jóvenes necesitan que se les guíe, que se les ayude en lo que es la tolerancia, la frustración, entonces, es importante el compromiso de los padres que, a veces, son muy sobreprotectores o a veces muy ausentes”, refirió.
Hábitos. En cuanto a los hábitos que la persona debe seguir para dejar de consumir, la sicóloga detalló que son muchos factores que se deben tener en cuenta, ya que el usuario generalmente tiene mucho tiempo libre, no tiene actividades fijas, no practica deportes, no tiene responsabilidades en su familia hay muchos conflictos o tiene amigos con los mismos vicios.
“En ese contexto, la persona tiene que dejar amistades y lugares, hacer actividades físicas, tomar responsabilidades, si ya trabaja; tomar en serio su trabajo porque la droga lo incapacita para desarrollar sus actividades”, indicó.
Al respecto, señaló que descansar bien las horas necesarias, alimentarse correctamente, continuar con el tratamiento sicológico o siquiátrico ayuda mucho a la persona, que más que nada debe comprometerse con mucha fuerza de voluntad para acudir a las terapias.
Sin familia. Dejar las drogas para jóvenes o adultos en situación de calle y sin familiares, también es posible, pero al mismo tiempo es un desafío importante.
Así lo acreditó Emiliano Jara, quien nos relató su testimonio de cómo sin ingresar a un centro de desintoxicación o ir a rehabilitación estableció un día para dejar de consumir.
Se comprometió a cumplir a fuerza de voluntad, primero por 15 días hasta que acudió a un centro de rehabilitación.
Emiliano ahora ayuda en grupos de apoyo a adictos que funcionan en el predio de la Iglesia Ministerio de Familia de Itauguá. Además, es coordinador en la Red de Voluntarios del Paraguay (0982) 568-368, realizando visitas en el Centro Educativo La Esperanza de Itauguá.
Centros. La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) ofrece un amplio material que incluye, Centros de Rehabilitación y grupos de apoyo, con sus números de teléfono y dirección en todo el país, que se encuentra en su página web: www.senad.gov.py