Unos delincuentes llegaron en la madrugada de este lunes hasta una estación de servicio, ubicada sobre la ruta PY02, a la altura del kilómetro 37, en el acceso a la localidad de Ypacaraí, en el Departamento Central, y se alzaron con aproximadamente G. 60 millones, tras lo cual se dieron a la fuga.
Durante la mañana de este lunes, agentes policiales realizaron un rastrillaje por la zona y a un kilómetro de la gasolinera encontraron un automóvil que presuntamente habría sido utilizado por los asaltantes durante el hecho, informaron a través de NPY.

De acuerdo con el relato del comisario Rubén Contreras, los asaltantes presuntamente interceptaron el local alrededor de las 5:00 de esta jornada y redujeron al guardia de seguridad mediante un golpe en el rostro, apropiándose de su escopeta.
Posteriormente, se dirigieron hasta los otros empleados del sitio, a quienes presuntamente amenazaron con disparar si no les entregaban el dinero que exigían.
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Después, los desconocidos fueron hasta el área de administración y se apoderaron de todo el dinero que se encontraba en la caja, cuyo monto ascendía aproximadamente a los G. 60 millones y correspondía a la recaudación del fin de semana. Aún se está haciendo el arqueo para confirmar la suma.
Hasta el momento se presume que fueron dos los hombres que cometieron el atraco, pero no se descarta que una tercera persona haya actuado como cómplice a bordo de un automóvil.
Policía halla vehículo
Durante un procedimiento de rastrillaje por la misma zona, en Ypacaraí, agentes de la Policía Nacional hallaron abandonado un vehículo que se presume fue utilizado para el hecho.
El rodado fue abandonado con las puertas abiertas en un patio baldío asentado a alrededor de un kilómetro de la gasolinera asaltada. Se trata de un Toyota, modelo Platz, de color dorado, sin matrícula, que presumiblemente es robado.
Según señaló el jefe policial Contreras, ahora se procederá a analizar las imágenes de circuito cerrado de la estación de servicio y de las inmediaciones del lugar.
Hace aproximadamente un año ya se registró otro asalto en el mismo lugar, pero en aquella ocasión los delincuentes se alzaron con G. 150 millones.