La denuncia, vista por la AFP, afirma que el duque de York, segundo hijo de la reina de Inglaterra, es “uno de los hombres poderosos” a los que Virginia Giuffre fue “entregada con fines sexuales”.
Los hechos ocurrieron entre 2000 y 2002, cuando la denunciante tenía 16 años, y se hicieron a través de la extensa red de tráfico sexual por la que Epstein fue encarcelado. El financiero se suicidó en una prisión de Manhattan en el verano de 2019.
“Hago responsable al príncipe Andrés de lo que me hizo. Los poderosos y los ricos no están exentos de rendir cuentas. Espero que otras víctimas vean que es posible no vivir en el silencio y el miedo”, dijo Giuffre en una declaración difundida a los medios de comunicación.
El príncipe Andrés, de 61 años, negó “categóricamente” estas acusaciones en una entrevista con la BBC en noviembre de 2019. El miembro de la casa real británica expresó incluso sus dudas sobre la autenticidad de una foto en la que aparece con Giuffre y, al fondo, Ghislaine Maxwell, que sigue encarcelada por el caso Epstein.
A pesar de sus desmentidos, su asociación con el empresario estadounidense le ha obligado a retirarse de la vida pública.