Sin embargo, unas horas después la joven embarazada sintió la pérdida de líquido y un aumento del dolor; ante esto retornó al hospital como a las 11:00 de la mañana. Su mamá pidió a los médicos que sea sometida a una cesárea ya que su primer hijo nació mediante este procedimiento, pero le dijeron que debía tener un parto normal ya que se encontraba con dilatación 7.
La señora Benítez denunció que la trabajadora de salud minimizó la situación con el argumento de que la paciente era “muy mimada”. Según la denuncia, la joven madre no recibió atención adecuada, por lo cual el bebé habría nacido sin signos de vida. Además, de la falta de atención adecuada a la paciente, reclaman la falta de información de los médicos sobre lo que pasó, ya que tuvieron que contactar con el pediatra para revisar a la criatura.
La familia pide respuestas y solicita que se mejore la atención de los profesionales del hospital, que sean capaces de garantizar una atención adecuada a las pacientes para que no se vuelva a repetir una situación similar. J.R