Jorge Galeano, dirigente de la CNI , informó que iniciaron un lobby en el Congreso para revertir la situación. “Se plantea (la agricultura familiar campesina) como un subprograma dentro del proyecto de presupuesto, no como un programa”, explicó.
El presupuesto del 2017 para el MAG ascendía a G. 612.334.185.326 (USD 111 millones), y el proyecto de presupuesto aprobado por Diputados esta semana asciende a G. 450.099.106.595 (USD 82 millones).
Observando el detalle del proyecto aprobado, se ven aumentos en salarios, servicios no personales e inversión física, mientras que sufrieron reducciones las transferencias.
Para Galeano, las reducciones tienen mucho que ver con la baja ejecución que ha tenido la cartera estatal con respecto al presupuesto 2017, la cual no superaría el 52%, señaló.
“Esto precariza aún más lo que tenemos”, lamentó el dirigente campesino.
También cuestionó que el dinero recaudado con la Ley de Impuesto al Tabaco no fue invertido este año en programas para la agricultura familiar campesina y agroecológica. La ley establece que un 25% de lo recaudado debe ser destinado a ello.
IMPORTANCIA. Se llama agricultura familiar campesina a aquella producción realizada por labriegos propietarios de fincas de menos de 30 hectáreas. Lo cultivado sirve para alimentación de la propia familia productora y también para comercialización.
Según datos del MAG, unos 269.336 labriegos pertenecen a esta categoría y son responsables de la alimentación del 70% de la población.
Sigue el proceso
Por otro lado, Galeano informó que aún no acabó el proceso de control de la lista de posibles beneficiarios de la Ley de Emergencia. Denunció que el Registro Nacional de Beneficiarios (Renabe) no actualiza los nombres de las personas que se acoplaron recientemente, por lo que consideran que el control quedará desfasado. El lunes, a las 8.00, se reunirán con el titular del MAG, Marcos Medina, para conversar al respecto.