“Nos sorprendió la noticia de la represión en Guahory (...) Mientras que se disipa la polvareda del paso del Rally Dakar se levanta la cortina de humo”, expresaron a través de un comunicado firmado por al menos 25 organizaciones.
Recordaron que desde la semana siguen las noticias sobre el desalojo de la comunidad campesina que está en disputa por falsificación y entrega de títulos de tierras a personas no sujetas a la reforma agraria. “Mientras que los campesinos del lugar fueron estafados por el organismo encargado de la gestión de la reforma, el Indert”, dijeron sobre la injerencia del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra.
Acusan de que se benefició a terratenientes y la Policía para tranquilidad de los mismos actuó con mucha violencia en el desalojo. “En vez del diálogo se los reprimió con fuerza”, lamentaron.
Los campesinos se negaron a aceptar la propuesta del Indert de otorgarles una nueva propiedad en Yhú, ya que esta asegura que no es apta para el cultivo.
De igual manera, los compatriotas condenaron la burda criminalización de la protesta social y una “guerra” mediática y campaña de desinformación gestada por los terratenientes.
Aseguran que en Paraguay gobierna un sistema político en el que no hay equilibrio de poderes y por ende, el Judicial no tiene garantías para los campesinos. “El Gobierno impone una clara política de represión a comunidades campesinas e indígenas que están en la mira de poderosos intereses”, culminaron.