Los excesos de velocidad de los ómnibus del transporte público intermunicipal del interior del país, donde ponen en riesgo la vida de los pasajeros, son un mal que se arrastra desde hace tiempo y, pese a quejas de los usuarios, no se pone freno a esta situación. Por lo general, los buses que circulan a mayor velocidad que la permitida por ley son por carreras que realizan entre unidades de la misma compañía o de empresas competidoras.
Recientemente una unidad con pasajeros de la firma Lomagrandense, que hace el servicio entre el distrito de Loma Grande, en el Departamento de Cordillera, y Asunción, fue a embestir contra un local comercial, al transitar por una avenida en el casco urbano de la ciudad de San Bernardino.
Este hecho motivó que pobladores de la ciudad veraniega exteriorizaran por las redes sociales la alta velocidad con que unidades de dicha empresa cruzan la localidad, y que en algún momento tendría que ocurrir un accidente.
“Es mi temor de todos los días cuando veo a esta empresa de transporte pasar frente a mi negocio a una velocidad exagerada, y hasta que se materializó, cuando uno de los colectivo desfasados por problemas mecánicos embistió contra una columna que está a unos pocos centímetros de mi local”, lamentó María Dolores Gómez en Facebook.
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsAppEn las redes sociales también señalan con frecuencia casos de excesos de velocidad de buses de empresas que circulan por las rutas del interior, porque están realizando carreras con ómnibus de otras empresas competidoras del mismo itinerario.
Hay algunas que son muy conocidas por esa competencia de velocidad en las rutas, donde conductores de vehículos particulares les fotografían pasando hasta las líneas de prohibición de adelantamiento en las rutas. El director de la Dinatrán, Juan José Vidal, manifestó que “no corresponde a nuestra institución controlar estos casos. Es un aspecto que tiene que ver con la aplicación y control de las normativas de tránsito que fijan velocidades de los vehículos”.
Precisó que son la Patrulla Caminera, en las rutas, y las municipalidades, en calles y avenidas de las ciudades, las que deben actuar y atender los casos de exceso de velocidad de los ómnibus del interior. Desde la Caminera no respondieron a los llamados de este medio.