El trabajo, que publica este lunes la revista “Cell”, es el primero en detectar la presencia de células inmunes especializadas en los corales y ha servido para crear el primer atlas completo de los diferentes tipos de células de estos corales.
Los hallazgos proporcionan nuevos conocimientos sobre la biología molecular y la evolución de los corales y permitirán mejorar la conservación de los arrecifes de coral, ecosistemas amenazados por el aumento de las temperaturas y la acidificación de los océanos.
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Según ha informado el CRG en un comunicado, el mapa detalla 40 tipos de células diferentes en las tres etapas principales del ciclo vital del ‘Stylophora pistillata’.
Los científicos han encontrado los mecanismos moleculares responsables de procesos biológicos vitales, como la formación del esqueleto del coral, que sirve de hábitat para gran cantidad de especies marinas.
También han descubierto cómo los corales establecen una relación simbiótica con las algas fotosintéticas que residen dentro de sus células.
Los autores del estudio se sorprendieron al descubrir la presencia de células inmunes especializadas que utilizan muchos genes típicamente asociados con la función de las células inmunes a los vertebrados.
Existen teorías que indican que la inmunidad innata de los corales desempeña un papel en la preservación de la salud de los simbiontes de algas, así como en su resiliencia contra el aumento de las temperaturas y la acidificación, pero hasta ahora no se había reportado la existencia de células inmunes especializadas en los corales.
Los investigadores han secuenciado la genética de los corales de los arrecifes, que proporcionan un hábitat a alrededor del 25% de los animales marinos gracias a que construyen las estructuras biogénicas más grandes del mundo.
“Nuestro trabajo define de manera sistemática la biología molecular de las células del coral. El atlas de células ayudará a comprender mejor las respuestas de los corales al aumento de la temperatura y la acidificación de los océanos, y puede ayudar a diseñar intervenciones que aumenten la resistencia de los arrecifes de coral que todavía nos quedan”, ha explicado el coautor del estudio y jefe de grupo del CRG, Arnau Sebé Pedrós.
“Este estudio también es un buen ejemplo de cómo las tecnologías de genómica de células individuales están revolucionando nuestra comprensión de la biodiversidad y la evolución animal, reduciendo la brecha entre los genomas y los organismos”, ha añadido.
Como los corales pétreos no se cultivan bien en laboratorios, para hacer la secuenciación los científicos israelíes recogieron los corales en diferentes etapas de su ciclo vital en el Golfo de Eilat y luego los transportaron al Instituto Weizmann y al CRG de Barcelona para la secuenciación y el análisis.
El estudio es uno de los pocos que lleva a cabo análisis unicelulares en especies muestreadas en la naturaleza, han destacado los investigadores.
Los corales pétreos son especies fundamentales en muchos arrecifes de coral y comienzan su vida como una larva nadadora que se dispersa y se asienta como un pólipo, que construyen rápidamente una matriz rica en proteínas que forma un esqueleto de carbonato de calcio.