El prófugo capo narco Sebastián Marset compartió un video, desde la clandestinidad, a la prensa boliviana, donde afirma que el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico de Bolivia (Felcn) lo ayudó en su huida. El jefe de la Felcn contestó que su “carrera no va a ser manchada por mentiras”.
“Gracias a la ayuda del director de la Felcn logré irme, porque él me avisó que el ministro ya había dado orden de aprehensión contra mí. Agarré una platita y me avisó que me fuera... No hizo las cosas bien y está molestando a gente que no tiene nada que ver. Quiero que se sepa eso”, indica en el video que fue enviado vía WhatsApp a la mesa de redacción de Unitel.
También dice que su situación “es complicada”, pero que no quiere implicar a personas inocentes. “Todos creían que era Luis Paulo Amorim, ninguna de las personas que están pasando un mal momento no tienen que ver con mis cosas y se están yendo al carajo con eso” (sic), apuntó.
En el audiovisual, el considerado capo narco afirma que ya dejó tierras bolivianas. Mientras que por mensajes habría amenazado a periodistas por realizar ciertas publicaciones.
El director general del Felcn Ismael Tito Villca salió al paso de las declaraciones de Marset, mencionando que su carrera profesional policial de 30 años no va a ser manchada simplemente por mentiras y declaraciones de un narcotraficante. “Niego y rechazo rotundamente toda esa información”, refirió.
Datos. Ayer, personal de Inteligencia de la Policía Nacional dio a conocer que desde febrero de este año manejaban datos sobre la posible presencia de Sebastián Marset en un condominio de la localidad de Santa Cruz, en Bolivia, información que fue compartida con las autoridades del vecino país.
El ministro del Interior, Federico González, aseguró a Monumental 1080AM que personal del Departamento de Investigaciones de la Policía Nacional viajó hasta Bolivia para trasladar la información sobre el paradero del supuesto narcotraficante.
González reconoció que al tratarse de reportes de inteligencia, es difícil que la totalidad de los datos sean precisos. Asimismo, aseguró que mantuvo constantes comunicaciones con el ministro de Gobierno boliviano Eduardo del Castillo.
La posibilidad de que las autoridades hayan demorado las acciones para capturar a Marset, tras los reportes brindados por Paraguay, causó una ola de críticas, hacia el ministro Eduardo del Castillo.
El mismo aseguró que supo recién en junio de este año sobre la existencia de Marset, durante una reunión de ministros de seguridad de la región.
Su admiración al N° 23 es por su devoción a San Jorge
El considerado narco uruguayo Sebastián Marset tiene una peculiar preferencia con el número 23, numeración que utilizaba como jugador del club Los Leones, de la Segunda división en Bolivia. Esta preferencia, según los investigadores, tiene relación a su devoción hacia San Jorge, cuya solemnidad se celebra el 23 de abril.
Imágenes de este santo aparecen en varias de sus propiedades. Asimismo, una de las estancias vinculadas a A Ultranza PY se denomina 23 de Abril, mientras que su grupo empresarial utilizado para el lavado de activos se denomina San Jorge.
Por otro lado, la firma Total Cars fue inaugurada el 23 de abril y el hangar 23 era la base de sus operaciones aéreas.
La devoción hacia alguna imagen religiosa es habitual entre personas que están ligadas a estructuras del crimen organizado.
Marset, dueño del tráfico aéreo de la cocaína boliviana
Dueño y señor. La Europol publicó un extenso informe a través del cual señala al uruguayo Sebastián Marset Cabrera, buscado en Paraguay en la causa A Ultranza Py y en más de 100 países, como el líder del esquema que trafica drogas en avioneta desde Bolivia.
Dicho informe fue compartido este año por la Europol con autoridades bolivianas. El documento consta de 900 páginas que incluyen por lo menos 100 interceptaciones de comunicaciones, informó el portal El Deber.
Según el documento, Marset controlaba la producción, el tránsito, acopio, exportación y lavado de todo el esquema. Además, es sindicado como el ideólogo, organizador y supervisor de todas las operaciones ilícitas. Se sospecha que su grupo hizo hasta 1.000 vuelos entre 2019 y 2022.
Un documento, elaborado por la Unidad de Investigación Sensitiva de Paraguay, reveló que Marset se asoció con el piloto Gilberto Esteban Sandoval Giménez, quien logró comprar 40 avionetas en favor de la organización y contrataba los vuelos con Bolivia. El informe no precisa la zona de la que proviene la cocaína, pero la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) halló más de 40 pistas clandestinas en Santa Cruz, Beni y Tarija.
