A finales de setiembre, once personas, entre ellas los cabecillas de la red, fueron detenidas en Francia y cuatro en España, declaró a la agencia AFP, Elvire Arrighi, responsable de la Oficina Central de Represión de la Trata de Seres Humanos (Ocrteh).
Otros cuatro miembros de la red, tres hombres y una mujer, fueron detenidos este martes y este miércoles en Paraguay, donde fueron reclutadas las cerca de 40 víctimas identificadas, de entre 20 y 30 años.
Las 15 personas fueron acusadas de “tráfico de seres humanos en banda organizada” y 11 fueron encarceladas.
“Se trata de personas que reclutan a las víctimas, les prometen un trabajo en Europa, quedándose el dinero de los beneficios del tráfico y reinvirtiéndolo en bienes inmuebles en el lugar”, dijo Elvire Arrighi, estimando que la “red criminal era familiar y estaba bien organizada”.
Durante los allanamientos efectuados a finales de setiembre en Francia, se encontraron y entrevistaron a unas 15 víctimas en lugares de prostitución y se incautaron de 162.000 euros (183.000 dólares) en efectivo y tarjetas de teléfono.
La red del crimen organizado se basaba en una división de funciones: “Los que publican los anuncios, los encargados de trasladar a las víctimas de un apartamento a otro, los que reciben las llamadas y conciertan las citas, los encargados de enviar el dinero y los que lo recogen”, dijo Elvire Arrighi.