Paraguay apunta a crecer en el año 2023 por encima de su referencia potencial y a mantener una dinámica económica favorable, inclusive hasta el año que viene, caminando, a su vez, en una senda de convergencia de la inflación hacia las metas oficiales, según lo que explicó el economista Diego Ciongo, integrante del Departamento de Investigación Macro de Itaú Unibanco.
El experto argentino realizó ayer una charla en Asunción sobre las perspectivas económicas de Argentina, Uruguay y Paraguay, resaltando que la economía nacional es la que muestra las mejores señales y la que alimenta el mayor optimismo. Para el presente año, Itaú Unibanco vaticina que el producto interno bruto (PIB) local registraría un crecimiento de 5%, mientras que la variación positiva de los precios cerraría en 4,5%.
“Mirando la economía paraguaya, la verdad es que estamos muy optimistas. No vemos mayores riesgos, me parece que el principal riesgo lo tuvieron el año pasado con la pérdida de la cosecha que tuvieron, pero este año somos muy optimistas (...) parece un buen año por delante el que se viene para Paraguay”, indicó. A su vez, para el 2024, los pronósticos apuntan hacia un aumento de 3,5% en el PIB y una inflación de 4%.
desafíos. Pese a la mirada favorable que se tiene para el más corto plazo, Ciongo también se refirió a los desafíos que tiene Paraguay en el ámbito económico. En ese sentido, refirió que si bien Paraguay tiene niveles de deuda pública inferiores a los de otras naciones de la región, una cuestión a cuidar es la alta dolarización de los compromisos, en torno a un 90%.
Por otro lado, el experto habló de la necesidad de ir avanzando hacia una mayor diversificación del producto, para no tener un impacto tan profundo, por ejemplo, en épocas de condiciones climáticas adversas. En ese sentido, puso el ejemplo de Uruguay, que pese a la sequía que viene enfrentando y sus efectos, podría cerrar el año con cifras levemente positivas, considerando la dinámica positiva de sectores como el turismo.
“El hecho de diversificar la economía te da ventajas cuando tenés un shock externo muy fuerte”, manifestó. Adicionalmente, Diego Ciongo hizo una valoración respecto a qué estaría faltando para que Paraguay logre el grado de inversión. “Cuando nos toca hablar con las agencias de crédito e inversores sobre Paraguay les encanta todo, pero tienen algunos reparos sobre la parte institucional (...) yo creo que todavía las agencias de crédito no se la juegan de darle (al país) el grado de inversión o inversiones más sofisticadas no vienen porque no les termina de convencer el tema de la institucionalidad”, dijo.
regional. Respecto a las perspectivas para Argentina y Uruguay, Ciongo aseguró que en el primer caso se prevé una contracción del PIB en torno a 3%, mientras que en el segundo se crecería 2%, pero que en ambos países golpeará la sequía.
Resultado en las elecciones no influiría
Al ser consultado sobre si el resultado de las próximas elecciones podría tener un impacto en términos económicos, Diego Ciongo señaló que no existen indicios, al menos por el momento, de que las elecciones puedan ser un factor relevante en cuanto al rumbo de la economía paraguaya. “Si se leen las declaraciones de las agencias de crédito, de las últimas que hubo sobre el país, nadie marca un riesgo sobre los fundamentos del país en el mediano y largo plazo (...) nadie tiene grandes dudas sobre la dirección que va a tomar el país, independientemente del candidato que gane”, manifestó. Sin embargo, reconoció que “quizás” hay más interrogantes respecto a una hipotética victoria de Efraín Alegre en cuanto a la conformación de su equipo para el Gobierno.
La cifra
5% es el crecimiento que se espera para la economía paraguaya en 2023, según la estimación de Itaú Unibanco.