El fray Restituto Palmero, secretario general de la Causa de Beatificación de Chiquitunga, afirmó que a partir de ahora aguardan otro milagro de la carmelita paraguaya para que el hecho puedan enviarlo a Roma para su estudio. De realizarle el reconocimiento por parte de la Iglesia Católica, la canonización será una realidad.
Consideró que la santificación llegará pronto ante la devoción popular en torno a ella, “porque es el pueblo el que lanza a las personas y María Felicia es muy querida. Eso lo pudimos ver el sábado con el estadio lleno”, resaltó el religioso de la congregación Carmelitas Descalzas.
PROMOTOR. Palmero trabajó para la causa de beatificación durante 17 años. Para hacer conocer a María Felicia de Jesús Sacramentado y promover la devoción hacia ella, se encargó de repartir como mínimo ocho millones de estampas y dos a tres millones de folletos, según el fray. Estos escritos fueron tanto en español, italiano, inglés y portugués.
“Los boletines que se imprimían eran para informar cómo iba el proceso de la causa, entonces allí yo colocaba todas las gracias que venían. Los folletos también contenían la vida de ella. Cuando me dieron este trabajo enseguida me llamó la atención esta figura, sus cartas y poesías son preciosas; tenía un espíritu muy sencillo”.
El religioso español, quien reside en Paraguay desde hace 18 años, indicó la satisfacción de ver que ahora todos hablan de Chiquitunga, la monja paraguaya cuya historia se encargó de difundir por tanto tiempo.
“Ha sido un trabajo constante, sin interrupción. Normalmente los procesos de beatificación tardan entre 25 y 30 años. El de la beata fue muy sencillo porque no fue una mujer que tuvo cargos públicos o civiles. Fue una laica comprometida y no hay complicaciones a la hora de estudiarla a ella como persona o a sus escritos”, comentó.
Para la canonización se aguarda encontrar otro suceso sin explicaciones vinculado a la beata. “A partir del momento en que se aprobó el milagro anterior, si hay otro hecho extraordinario empieza el proceso, se envía a Roma para el estudio por parte de médicos, técnicos y, si se aprueba, entonces llega la canonización”, indicó. “Es como todas las cosas, hay que tener ilusión y enamorarse de la causa por la que se trabaja”, recalcó.
Misa. En la jornada de ayer se realizó una misa en el templo de las Carmelitas Descalzas. El evento eucarístico contó con la presencia del padre Romano Gambalunga, encargado de llevar adelante los procesos en Roma para la beatificación de la carmelita paraguaya. Los fieles asiduos del templo afirmaron que la concurrencia en el lugar aumentó a medida que llegaba el momento de confirmar a Chiquitunga como beata.
Normalmente los procesos de beatificación duran cerca de 30 años, el de María Felicia como 17. Fray Restituto Palmero, secretario de la Causa.
Esto inspira a vivir en santidad, que puede llevarse en el matrimonio como en la vida contemplativa. Anastacia Cáceres, religiosa.