PEDRO JUAN CABALLERO
El juez de Garantías José Valiente emitió ayer una orden de captura internacional en contra de Clemente Gringo González y su hijo no reconocido Édgar López. Ambos están imputados por la Fiscalía como los supuestos responsables del robo de 252 kilos de cocaína de la Jefatura de Policía de Amambay el pasado 17 de enero.
Ahora, la Interpol de Paraguay deberá comunicar a las otras filiales de todo el mundo la resolución judicial sobre González y López. Con esta alerta, de ser detenidos en el exterior ambos deberán ser extraditados a Paraguay, señalaron fuentes judiciales.
Paralelamente, el fiscal que investiga el caso, Óscar Samuel Valdez, manifestó ayer que hay elementos para sospechar que ambos se encontrarían actualmente en Bolivia, aunque tampoco descarta que estén en territorio brasileño.
Asimismo, Valdez también dijo presumir que el cargamento de cocaína fue transportado hasta la frontera brasileña el mismo día del robo en la Jefatura. En Brasil la droga fue comercializada, indicó el representante del Ministerio Público.
EL “DUEÑO”. Clemente González está sindicado como el dueño del cargamento y quien ordenó la “recuperación” de la droga de la base de Policía en Pedro Juan Caballero. Los investigadores señalan que Gringo es uno de los importantes narcotraficantes en la zona y que su hijo Édgar López personalmente llevó la droga de la Jefatura.
Luego del robo de la carga, los investigadores incautaron un vehículo de la marca Volkswagen color rojo tipo Cross Fox que pertenece a López. El rodado presuntamente fue el utilizado para transportar la droga desde la Gobernación –cuyo patio es colindante con la Jefatura– según las imágenes de un circuito cerrado de cámaras de seguridad.
Según la Fiscalía, López fue asistido por su esposa, María Elizabeth Ferreira. Esta última se encuentra detenida e imputada por el caso.
Asimismo, están imputados y presos los suboficiales Santiago Ferreira Coronel, Lucio Natividad Recalde Melgarejo y Celso Fleitas. Todos ellos estaban a cargo de la custodia de la droga en la madrugada en la que ocurrió el robo.
En un proceso distinto, fueron imputados los concejales departamentales de Amambay César Quevedo Isnardi (PLRA) y José María Bogado (ANR), así como el suboficial Vicente Arévalos. La investigación fiscal apunta a que los tres quisieron impedir el decomiso de la droga por parte de la Policía Antinarcóticos.
Los ediles y el policía supuestamente amenazaron con armas largas a dos antidrogas para que no revisen el vehículo en el que circulaban en Zanja Pytã. Posteriormente, antinarcóticos encontraron el vehículo abandonado y los 252 kilos en un yuyal en las cercanías.