Lograr convencer a los niños que lean no es tan simple, es por ello que aquí mostramos algunas de las ventajas que tendrán los pequeños lectores.
Con la actividad lectora a los chicos se les permitirá un mayor rendimiento escolar, comprensión del mundo de manera más lúcida y que la imaginación de los niños sea más rica.
Leer trae consigo beneficios varios e importantes. Es fundamental para lograr un buen rendimiento escolar, para eso es importante entender y comprender la lengua para alcanzar objetivos académicos, según una publicación en ethic.es.
Te mostramos 10 trucos para convertir a los niños en lectores:
1. Dar ejemplo
Para que los niños lean, primeramente son los adultos quienes deben hacerlo. Las probabilidades de que se conviertan en lectores son altas si es una costumbre habitual en la casa. Un estudio de la Fundación Bofill demostró que la lectura en casa mejora el rendimiento escolar y está visto que aquellos estudiantes que sus padres les leen tienen cierta ventaja ante los demás alumnos.
2. Leer en vacaciones
Los largos paréntesis de las escuelas y colegios se pueden aprovechar para la lectura. Uno de los momentos es durante los periodos de vacaciones por fin de curso o en la de invierno. No se debe de parar de animar a los chicos a la lectura, es un trabajo continuo. Es una oportunidad para que los estudiantes llenen sus tiempos libros leyendo algunas historias de aventuras o novelas que sean de su agrado.
3. No obligar a leer tal o cual libro
Lectura e infancia, un debate cíclico que suele darse con el tema de las lecturas obligadas a los escolares. Uno se pregunta si la elección de los libros se hace mal, ya que esto podría espantar a los jovencitos lectores. Para hablar de lectura placentera, no se debería obligar a tener que leer tales libros. La idea sería lograr incentivar.
4. Despertar su curiosidad
Permitirles que exploren es crucial para que encuentren libros de su agrado. Se deben respetar los intereses y la curiosidad infantiles. Así descubrirán poco a poco cuál es su yo lector y que puedan elegir libremente qué quieren leer. “Cuando se está tratando de mantener un hábito entre los pequeños es importante que cada uno vaya a su ritmo», apuntaban al hilo de una campaña de lectura veraniega desde Fundación Jaime Alonso Abruña y la Academia Jaime Alonso, quienes añadían que “además de elegir el libro de preferencia, puedan explorar a su gusto y de manera desorganizada su contenido”.
5. Leídas flexibles
Quienes escriben literatura infantil realizan constantemente un trabajo para que sus jóvenes lectores puedan entender y adaptan al nivel de comprensión lectora y al nivel de sus conocimientos sobre el mundo. Es por eso la importancia de ofrecer libros pensados para sus edades es crucial, aunque tampoco es necesario ser esclavos de las edades recomendadas; cada chico es un mundo y ser flexible con los textos según intereses y madurez.
6. Diversidad de lectura
Es importante eliminar los prejuicios que todavía quedan en algunos adultos frente a géneros literarios o formatos de presentación de las historias. Una novela de detectives no es menos que un clásico, ni un cómic es menos lectura que una novela sin ilustraciones. También escuchar un audiolibro sigue siendo lectura. Nunca está de más recordar, nuevamente, que lo que se busca es disfrutar con los libros.
7. Escuchar lo que se lee
En el proceso de aprendizaje lector la oralidad debe ser un hábito. Las recomendaciones pedagógicas interpelan a leer a los chicos antes incluso de que ellos aprendan a leer, así como a hacerlo con ellos una vez que ya tengan estos conocimientos. Jugar con las voces de las historias ayuda a potenciar la imaginación.
8. Visitar bibliotecas
El mejor lugar para despertar el amor a la lectura que una biblioteca. Allí, se encuentran títulos para niños y adolescente, sino muchas de ellas cuentan con actividades y propuestas para incentivar ese amor por los libros.
9. Premios con libros
Para verlos de una manera más atractiva también se puede dar los libros como un premio, como algo que se recibe en momentos importantes, ayuda a verlos de una manera mucho más atractiva y mucho más positiva. Lo mejor es obsequiar libros.
10. Que tengan su propia biblioteca
Por ultimo, la persona lectora necesita su propia biblioteca. Sentir que esos libros son propios y tenerlos siempre accesibles para leer y releer los favoritos es la base para afianzar ese amor por la palabra escrita.