La diputada colorada Marlene Ocampos logró ubicar a su hija, Evelyn Paola Segovia Ocampos, como directora de Promoción y Gestión Cultural de la Cámara de Diputados.
La resolución se dio a conocer ayer. La nueva designada reemplaza a Ana María Bottino, una antigua funcionaria de la Cámara Baja.
La designación se dio sin que la hija de la legisladora haya concursado para el cargo. Según una resolución de la propia Cámara Baja, un funcionario debe concursar para ocupar un cargo de director.
La diputada Ocampos defendió la designación de su hija, alegando que la misma usufructúa el puesto debido a su capacidad y por tratarse de un “cargo de confianza”, desconociendo la norma.
“Ella está preparada y capacitada para asumir ese cargo, tiene tres títulos universitarios, el cargo depende de una dirección de cultura, es un cargo de confianza”, expresó la legisladora.
Indicó que su hija estuvo trabajando en el Poder Judicial mucho tiempo.
“Es un cargo de confianza, directamente, tiene la capacidad y la idoneidad. Ella estuvo trabajando en el Poder Judicial desde hace 8 años, está trabajando para la institución, el cargo es de confianza y depende directamente de la designación del presidente de la Cámara, no necesita concursar. Yo no utilicé mis influencias, no fue parte de un acuerdo”, dijo en su defensa la legisladora.
El nombramiento y la posterior designación en una dirección causó malestar en los propios funcionarios de la Cámara Baja, quienes denunciaron ser discriminados.
defensa. A su turno, el titular de Diputados, Miguel Cuevas, consultado sobre el punto, defendió las designaciones de los nuevos contratados.
Afirmó que cada diputado tiene la posibilidad de poder contratar hasta tres personas de sus respectivas confianzas.
“Algunos utilizan totalmente este cupo, otros no y otros, sencillamente, no lo utilizan”, acotó.