La legisladora chaqueña acudió vestida de luto por los últimos casos de violencia y abuso de niños en el país.
Luego de rendir un tributo a las víctimas, entre lágrimas, relató que fue brutalmente golpeada y que quedó con secuelas.
Comentó que fue acompañada de presidentes de comisiones vecinales e indígenas y al terminar el acto pretendían tomarse una foto con el mandatario y manifestarle su agradecimiento. Pero no pudieron atravesar el cordón de seguridad porque dos militares del Regimiento Escolta Presidencial le impidieron el paso.
Ocampos les recalcó que era una diputada, pero apenas terminó de hablar le propinaron codazos en el lado izquierdo. Luego pudo llegar al presidente, quien le pidió disculpas.
En un momento posterior, otro efectivo militar le golpeó la zona del pecho.
Ocampos lamentó la violencia con la que actuaron los guardias del presidente y recordó que existen muchos casos de agresión a mujeres.
La diputada Kattya González le transmitió su solidaridad y resaltó que no es la manera de proteger a una autoridad. “Las mujeres somos focos de violencia en una sociedad machista”, señaló.
El presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Alliana, anunció que tomará el pedido de pronunciarse en contra del hecho. La legisladora Del Pilar Medina también acompañó a Ocampos. “Si así se le va a tratar a un parlamentario, espero que nunca me inviten a participar de ningún acto”, expresó.
Por su parte, la diputada Jazmín Narváez lamentó la violencia con la que procedieron los militares.
“Me solidarizo con Marlene Ocampos por la vergonzosa experiencia que involucró a colaboradores del Gobierno nacional”, destacó.
Lamentó que los militares no puedan diferenciar entre asesinos y pobladores comunes. “En manos de estos está la seguridad del presidente”, dijo.
En manos de estos está la seguridad del presidente. No pueden distinguir un hecho de violencia de un hecho de fiesta.
Marlene Ocampos,
diputada.