El pleno comienza con un segundo legislador en prisión, el colorado Miguel Cuevas, después de Ulises Quintana, también de Colorado Añetete.
Posteriormente a las tres ausencias sin justificar, el presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Alliana, deberá convocar a Vicente González, suplente del legislador de Paraguarí, como se hizo con Quintana, quien fue reemplazado por Rocío Abed.
A diferencia de Quintana, acusado por supuesto lavado de dinero y asociación criminal para el tráfico de drogas en el caso del Operativo Berilo, la mayoría de las bancadas sostienen que en el caso de Cuevas no hay motivos para la pérdida de investidura, ya que el hecho por el que se lo procesa sucedió durante su gestión como gobernador, no como diputado.
El oficialista está procesado por enriquecimiento ilícito, declaración falsa y tráfico de influencias.
Supuestamente, tuvo un ingreso de G. 5.734.307.036 y su egreso fue de G. 7.439.622.171, con una diferencia de G. 1.705.315.135, todo esto ocurrió durante los años 2009 y 2019.
También están imputados su esposa Nancy Florentín, su hijo Enzo Cuevas y la docente Griselda Duarte.
El diputado del Partido Patria Querida (PPQ) Sebastián García dijo que deberán debatir el caso de Cuevas ya que consideran que no corresponde un pedido de permiso. “Hay dos escenarios por separado, el caso judicial, que prevé que esté privado de su libertad. Y por ese lado hay que prever dentro del marco de la Constitución y las leyes si lo que corresponde es una vacancia temporal o permanente, lo que no creemos que corresponde es un pedido de permiso”, explicó.