El documento Dietas saludables a partir de sistemas alimentarios sostenibles, presentado por la Comisión EAT-Lancet, detalló que con este cambio de alimentación se podría prevenir entre el 19 y el 24% de las muertes de la población adulta.
La Comisión EAT-Lancet está integrada por 37 científicos líderes de 16 países especializados en diversas disciplinas como salud, agricultura, ciencias políticas y medioambiente.
De acuerdo con el documento, de aquí a 2050 se requerirán grandes cambios en los alimentos, pues se deberá duplicar el consumo mundial de frutas, vegetales, frutos secos y legumbres, y reducir en más de 50% la ingesta de carne roja y azúcares añadidos.
Las propuestas para lograr un cambio en el sistema alimentario van desde la producción hasta el consumo final.
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También se insiste en la necesidad de adoptar dietas consistentes mayormente en granos enteros, nueces, verduras y frutas, grasas insaturadas, reducir el consumo alimentos de origen animal, granos refinados y alimentos procesados.
Tener una dieta rica en vegetales y con menos alimentos de origen animal proporciona una buena salud y beneficia al medioambiente.
Sin embargo, en las poblaciones donde se presentan significativos índices de desnutrición, se recomendó continuar con el consumo de alimentos de origen animal.
De acuerdo con la Comisión EAT-Lancet, los alimentos no saludables son la principal causa de enfermedad en todo el mundo y la desnutrición es un problema que persiste.
Según el documento, cerca de 1.000 millones de habitantes en el mundo carecen de alimentos suficientes y muchos consumen una dieta poco saludable.
Esto contribuye “a la creciente carga de enfermedades no transmisibles, como diabetes y muertes prematuras por estos padecimientos”, dicta el estudio.
El organismo internacional advirtió que, de no pasar a la acción, se corre el riesgo de incumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el Acuerdo de París.
Destacó que los niños heredarán un planeta severamente degradado ambientalmente donde, además, una buena parte de la población sufrirá cada vez más de desnutrición y enfermedades prevenibles.
Para hacer frente a este problema, la Comisión EAT-Lancet reunió a especialistas de diversas disciplinas para desarrollar objetivos mundiales que favorezcan la creación de dietas saludables y una producción sostenible de alimentos.