Desde la segunda etapa del calendario escolar, que inicia el próximo 1 de agosto, las evaluaciones educativas serán cuantitativas para el sector público, es decir, los docentes sí deberán tomar exámenes a los alumnos.
Tal decisión fue anunciada por el viceministro de Educación, Robert Cano, atendiendo que durante esta primera etapa, afectada por la crisis del coronavirus, la educación enfrenta grandes desafíos en la virtualidad y los alumnos solo serán evaluados de forma cualitativa.
“A raíz de esta situación es que se define que la primera etapa va a ser cualitativa. A la vuelta de la pausa de invierno, los docentes van a reflejar sus informes cualitativos, pero ya para la segunda etapa, que comienza el 1 de agosto, va a ser cuantitativa la evaluación. Los docentes van a tener que dar exámenes que van a definir también la promoción del estudiante”, explicó el viceministro en comunicación con radio Monumental 1080 AM.
Lea más: Confirman que evaluación será sin calificaciones para la primera etapa
Consultado acerca de cómo se va a constatar si realmente los alumnos tuvieron un aprendizaje durante estos meses, Cano aclaró que a fin de año los maestros presentarán un informe sobre los los logros de los estudiantes.
No obstante, mencionó que las capacidades que no se lograron requerirán de una retroalimentación para los alumnos durante el siguiente año.
Los únicos que podrán poner notas durante la primera etapa son los colegios privados y privados subvencionados, cuyos directivos indicaron que los padres pagan por un producto cuya calidad debe ser calificada.
“Realmente esta es una situación que constantemente nos desafía a todos. Antes no existían recetas para abordar esto y hoy lanzamos una encuesta masiva dirigida a docentes, estudiantes y las familias para ver la percepción que tienen sobre la cuestión tecnológica y ver qué se puede hacer para mejorar y que el eje pedagógico tenga resultados”, señaló.
Nota relacionada: Petta sostiene que educación sigue de pie y no se arrodilló ante la pandemia
Por otra parte, Cano destacó que durante esta pausa de invierno, los alumnos no debieron llevar tareas de clases, de modo a que se pueda lograr un descanso y un oxígeno ante el confinamiento por la pandemia del Covid-19.