Directivos del Colegio Santa Teresa de Jesús, ubicado en Asunción, emitieron un comunicado dirigido a los padres de los alumnos, en el cual informaron que dos madres denunciaron, a través de correos electrónicos, a un docente por presunto acoso sexual verbal a sus hijas.
En el escrito se menciona que, al haber tomado conocimiento del hecho, los directivos procedieron a activar el protocolo establecido ante hechos punibles contra estudiantes, ejecutados por docentes. Se trata de la Resolución 711/22, del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC).
Ante esto, señalaron que, mientras se lleve adelante la investigación, el educador implicado “seguirá ejerciendo sus funciones a través de la modalidad virtual”, mientras que las actividades extracurriculares deportivas “no se verán afectadas”, por lo que seguirán desarrollándose en forma normal, pero bajo la coordinación de otro profesor.
En comunicación con Última Hora, Carmen Galeano, del equipo directivo de la institución educativa, aclaró que el caso está caratulado en la Fiscalía como “acoso verbal” y que ambas denuncias presentadas por correo hablaban de que el docente propinaba “halagos” y que era “piropeador”.
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Aseguró que ya se procedió a realizar entrevistas a todas las alumnas que tenían un relacionamiento directo con el involucrado, pero solo las dos afectadas, de 14 y 16 años, mencionaron haber sido víctimas de ese tipo de acoso, no así las demás.
Galeano explicó también que el denunciado se desempeña como coordinador deportivo, por lo que su función específica no era dar clases de forma directa. Sostuvo también que ni él ni otro profesor de dicho colegio tienen antecedentes judiciales, tal y como se mencionó en algunos medios de comunicación y redes sociales.
“Como institución educativa, nuestra prioridad es y será siempre el bienestar y la seguridad integral de nuestros alumnos, por lo cual garantizamos agotar todas las instancias de investigación de los hechos denunciados y, con base en ello, tomar las medidas que correspondan”, señala el final del comunicado de la institución escolar.
Los nombres de las dos adolescentes, de sus madres y demás detalles se omiten en cumplimiento del artículo 29 del Código de la Niñez, que prohíbe la publicación de datos que posibiliten identificar a los menores de edad en condición de víctimas o supuestos autores de hechos punibles.