El presidente colombiano, Iván Duque, anunció ayer domingo el retiro del proyecto de reforma tributaria presentado al Congreso el 15 de abril, que detonó las protestas sociales y desórdenes de los últimos cuatro días en el país.
“Le solicito al Congreso de la República el retiro del proyecto radicado por el Ministerio de Hacienda y tramitar de manera urgente un nuevo proyecto fruto de los consensos y así evitar la incertidumbre financiera”, dijo Duque en una declaración en la Casa de Nariño, sede del Gobierno.
La decisión del jefe de Estado ocurre luego de que las multitudinarias protestas de cuatro días contra esa iniciativa dejaran al menos cinco personas muertas aunque diferentes organizaciones sociales denuncian que son más.
Duque explicó que habló con los diferentes partidos políticos, gremios de la producción y otros sectores de la población y que el nuevo proyecto de reforma fiscal que será presentando al Congreso recogerá las propuestas que salieron de esos diálogos.
En esa dirección indicó que el proyecto incorporará una sobretasa de renta temporal a empresas, prorrogar el impuesto al patrimonio de forma temporal, incrementar el impuesto a los dividendos transitoriamente y crear una sobretasa de renta a personas de mayores ingresos, entre otros. “La reforma no es un capricho. La reforma es una necesidad. Retirarla o no, no era la discusión. La verdadera discusión es poder garantizar la continuidad de programas sociales”, manifestó.
Entre esos mencionó la prolongación del ingreso solidario, que hoy beneficia a más de 3,4 millones de hogares y ofrecer educación universitaria gratuita a jóvenes universitarios de los estratos sociales más bajos. Duque enfatizó que se busca también extender el subsidio a la nómina a través del Programa de Apoyo al Empleo Formal (PAEF) que ha beneficiado a cerca de 3,5 millones de trabajadores.
Igualmente dijo que se debe seguir buscando que se pueda devolver el impuesto del valor agregado (IVA) a los hogares más vulnerables.
La propuesta original incluía la ampliación de la base tributaria para incluir a los que menos ganan entre los que pagan impuestos y gravar con el IVA del 19% los servicios públicos de las clases media y alta, entre otras medidas que fueron el detonante de las protestas en todo el país.
En Bogotá y, principalmente, en Cali, las manifestaciones terminaron en actos vandálicos contra el transporte público, bancos y comercios, e incluso contra ambulancias. “El camino de un consenso despeja percepciones y nos permite decir con claridad que no habrá ningún incremento del IVA para bienes y servicios ni se cambiarán las reglas existentes. También queda claro que nadie que no pague impuesto de renta pagará ese tributo”, subrayó el presidente.
Los sindicatos y organizaciones sociales habían manifestado inamovibles en su exigencia de que sea retirado el proyecto de reforma tributaria y a menos que el presidente, encerrado en su torre de marfil, dé el reverso a esa iniciativa que no tiene posibilidades de ser aprobada en el Congreso, las manifestaciones, organizadas o espontáneas, no tienen pinta de acabar. EFE