Convocados por la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), los manifestantes en Quito y otras zonas del país reclaman al gobierno de Guillermo Lasso la reducción del precio de los combustibles en protestas que llevan ya nueve días.
Un grupo de unos 500 indígenas que chocó con la policía salió de su lugar de hospedaje en la Universidad Salesiana y pretendía llegar hasta la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE), que fue tomada por la policía en medio del estado de excepción que rige en seis de las 24 provincias del país, incluida Pichincha, cuya capital es Quito.
Para frenar su avance, policías antimotines lanzaron bombas lacrimógenas a los manifestantes, que con los ojos llorosos por el gas se dispersaron y luego volvieron a reagruparse.
“La democracia del Ecuador está en serio riesgo ante la acción concertada de personas exaltadas que impiden la libre circulación de la mayoría de los ecuatorianos”, dijo el martes el ministro de Defensa, Luis Lara, flanqueado por los jefes del Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea.
“Las Fuerzas Armadas no permitirán que se intente romper el orden constitucional o cualquier acción contra la democracia y de las leyes de la República”, afirmó Lara, que habló también en representación de las tres fuerzas.
En casi un año, el diésel subió un 90% (a 1,90 dólares) y la gasolina un 46% (a 2,55). Desde octubre pasado los precios están congelados por la presión social.
EXIGENCIA. La Conaie, liderada por Leonidas Iza, reclama rebajarlos a 1,50 y 2,10 dólares, respectivamente.
“Bajen las armas, somos pueblos de paz”, exclamaban algunos de los más de 5.000 indígenas que llegaron el lunes en caravana a Quito. Varios llevaban escudos fabricados con señales de tránsito y tachos de basura y pirotécnica artesanal.
Ecuador, cuya dolarizada economía intenta recuperarse del golpe de la pandemia, pierde unos 50 millones de dólares por día a raíz de las protestas, sin tomar en cuenta el sector del petróleo, el principal producto de exportación, según cifras oficiales.
La estatal Petroecuador registra una pérdida acumulada de casi 64.300 barriles de la producción total debido a que más de 230 pozos están “apagados” por las manifestaciones en la Amazonia.
Los indígenas también reclaman un control de precios a los productos agrícolas para mejorar sus economías familiares. Otra exigencia es una moratoria de un año para el pago de créditos con la banca.
“A nosotros los pequeños agricultores nos han subido bastantísimo las cosas (insumos y abonos) y nuestros productos no suben nada”, dijo a la AFP Tito Zamora, un indígena de la aldea de Sigchos en Cotopaxi.
Explicó que mientras un litro de leche se vende hasta en un dólar en Ecuador, ellos reciben por esa misma cantidad 0,35 centavos.
“SACAR A LASSO”. Mazabanda aseguró que el objetivo es “sacar a Lasso” del poder.
El mandatario, que asumió en mayo de 2021, ha denunciado que el movimiento indígena lo quiere “botar”.
“Hemos tendido la mano, hemos llamado al diálogo, pero ellos no quieren la paz, ellos buscan el caos, quieren botar al presidente”, declaró el gobernante en un video divulgado el lunes en Twitter.
La opositora Conaie participó en revueltas que derrocaron a tres mandatarios entre 1997 y 2005. En 2019, protagonizó violentas protestas que dejaron 11 muertos, más de 1.000 heridos.
UE y ONU ofrecen apoyo para diálogo
La Unión Europea (UE) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ofrecerán apoyo técnico en un eventual diálogo para que el Gobierno de Ecuador y los promotores de las manifestaciones contra el Ejecutivo puedan llegar a acuerdos, en momentos en que arrecian las protestas sociales en distintas partes del país. Ana Patricia Muñoz, de la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones de la Sociedad Civil, dijo a Efe que una Comisión Convocante, compuesta por más de 300 organizaciones de la sociedad civil, han invitado al diálogo a ambas partes. “Contamos con el apoyo técnico tanto de la Unión Europea como del sistema de las Naciones Unidas. Ellos van a brindar asistencia tanto en la fase previa a la concreción del diálogo como durante la concreción del diálogo”, dijo. Muñoz detalló que la asistencia es metodológica y con expertos nacionales e internacionales. EFE