El Departamento de Defensa de Estados Unidos “publica estos videos para clarificar cualquier malentendido por parte del público sobre si las grabaciones que han ido circulando son reales o no, y si hay más (contenido) en los videos. El fenómeno aéreo que se aprecia en los videos permanece clasificado como no identificado”, explicó El Pentágono sobre estas imágenes, que habían sido filtradas y llevan circulando en la red desde 2007 y 2017.
Le puede interesar: Fuerza Área de EEUU investigó avistamientos de ovnis en Paraguay
El primer material, el de 2004, fue compartido en el 2007 por uno de los tripulantes que presenciaron la escena; más tarde fue publicado junto a los otros dos por la organización To The Stars Academy (TTSA) y el diario The New York Times en diciembre de 2017 y marzo de 2018.
En 2019, la Armada estadounidense reconoció que las tres grabaciones eran reales, pero hasta ahora no las había difundido oficialmente.
La primera grabación, conocida por los expertos como FLIR1, muestra un objeto de forma oblonga, que se acelera fuera de la vista de los sensores.
En el video llamado Gimbal se escucha a un miembro de la tripulación decir “mira esa cosa”, en referencia a un objeto volador que, según dijeron, parecía ir contra el viento en 2015.
Por último, en la grabación conocida como Go Fast, también del año 2015, se aprecia un objeto volador que parece estar sobre la superficie del agua y se escucha a los equipos militares preguntándose: "¿Qué demonios es eso?” y "¿qué es eso, hombre?”.
El sitio web The Black Vault, dedicado a desclasificar documentos gubernamentales, fue el primero en destapar que la Marina estadounidense consideró que los fenómenos avistados fueron considerados ovnis por los equipos de especialistas.