Aseveró que en un foro con otros países, como México, Colombia, Chile, Uruguay, Paraguay y Argentina, hace unos días, coincidieron que en la pandemia –que buscó evitar la expansión del Covid– costó mucho que los organismos que protegen a la población trabajen, porque el aumento de la ciberdelincuencia fue de un 220% en la región.
“Ese porcentaje está sostenido por tres patas, ataques a los niños y adolescentes dentro de sus ámbitos (juegos, tareas escolares), el ataque para el robo de cuentas, y el ataque a billeteras electrónicas, ya sea por cobros, subsidios, para extorsión y para jaquear la cuenta”, analizó el director de la fundación.
SIN CONCIENCIA. Un punto que preocupa a los analistas de seguridad es que la gente sigue sin tomar las medidas adecuadas para protegerse ante los riesgos cibernéticos.
La Policía Nacional y el Ministerio Público habían advertido que están proliferando extorsiones por redes, pornografía infantil, robos de cuentas y otros hechos punibles.
“Los más afectados terminan siendo los más vulnerables, los niños, los que hacen home office y los que abrieron sus billeteras electrónicas”, dijo Gaspar.
Como la educación digital y los usos de las tecnologías van a continuar en el 2021, según el experto, no estamos preparados, porque falta tomar conciencia.
DENUNCIAS. Desde el Departamento de Cibercrimen de la Policía Nacional, también advirtieron que, por el aumento de consumo de internet en plena cuarentena, crecieron también las denuncias. Hay entre siete a diez casos por día de vulneración de datos de WhatsApp.
El oficial primero Guido Roa señaló que mayormente los delincuentes se hacen pasar por funcionarios de las telefonías.
“El modus operandi funciona así: Te llaman a ofrecer alguna promoción o actualización y si es que llegan a convencer, dicen que va a llegar un mensaje que piden reenviar para proceder a la actualización y al mandarles el código, automáticamente ya perdés el WhatsApp”, indicó.
Así, las personas empiezan a extorsionar, pidiendo que se les gire dinero o pasar algún contenido íntimo de su interés para recuperar la cuenta.
También al tener acceso a los contactos, empiezan a pedir dinero de emergencia a los familiares por un supuesto accidente u otro invento.
Además, Roa explicó que este año, “al no poder salir, desestresarse y hacer actividad física, eso implica un mayor consumo de internet y la falta de cuidado, ya que se visitan páginas no certificadas y se pueden adquirir virus”.
Lamentó que muchas denuncias también son por sextorsión, en que caen tanto mujeres como hombres. Justamente, este año, la Fiscalía y la Policía Antisecuestro desbarató en mayo la que sería la más grande red de sextorsión en el país, que operaba desde la cárcel de Itapúa.
Nuevo fraude
Desde el Ministerio Público alertaron del sim swapping, un nuevo fraude en auge, donde se apoderan de la línea celular de la víctima, accediendo a la información personal.“Se comunican con la empresa de telefonía con la excusa de haber extraviado o roto el celular. Así, utilizan los datos conocidos de la víctima para contestar las preguntas de seguridad”, detallaron.El delincuente accede a los mensajes, por lo que recomiendan activar la doble autenticación en WhatsApp o usar Google Authenticator.