Resalta el hecho de que no hay ningún país latinoamericano donde la mayoría de la población diga que el parlamento lo representa.
República Dominicana es el primero con el 41%, seguido por Uruguay (35%) y México (34%).
En contrapartida, un 78% de paraguayos consultados señalaron que el Congreso no los representa.
Entre 2023 y 2024 aumentan del 70% al 75% quienes dicen que el parlamento no los representa. En Perú es casi toda la población (91%), seguido por Ecuador (88%), Colombia (83%), Honduras (81%) y Costa Rica (80%). Incluso Costa Rica, que cuenta con buenos indicadores de la democracia, tiene en este aspecto una deficiencia importante.
“La crisis de representación que esto implica es de magnitud”, señala el informe.
Y añade: “La representación política es magra en un escenario de debilidad de los partidos y de alta desconfianza”
Además, menciona que la actitud y el voto hacia los partidos políticos, así como la evaluación y el valor de las elecciones son deficientes en la región.
Menciona que el sistema político no se sostiene con estos bajos niveles de confianza, evaluación y legitimidad de su instrumento principal que son las elecciones y sus partidos.
En eso estriba la mayor debilidad de las democracias latinoamericanas, afirma el estudio. El Parlamento actual paraguayo es uno de los más criticados