Una educación virtual que no funciona, sentencian desde la Unión Nacional de Centros de Estudiantes (Unepy), con el lanzamiento de una encuesta realizada a más de 5.000 estudiantes de todo el país sobre esta modalidad a distancia por el Covid-19.
En la encuesta, los resultados no son para nada alentadores y coinciden con otros miembros de la comunidad escolar, como docentes o padres de familia. Solo un 14,6% califica a las clases en pandemia como buenas o muy buenas, un incremento “irrisorio”, según indican desde el gremio, considerando el 10% que opinaba lo mismo al inicio de esta metodología.
El 48,1% la considera como mala o muy mala, mientras que otro 37,3% del estudiantado indica que es “más o menos”; es decir, a medias. Sumando estas cifras, la conclusión es que el 85,4% de los jóvenes desde el tercer ciclo de la Escolar Básica y la Educación Media están disconformes con las clases a distancia.
¿Es aceptable que en cinco meses el único resultado conseguido es que un 12% de estudiantes que no entendían nada hoy entienden más o menos, mientras que un importante 48% continúa sin tener idea de lo que supuestamente está estudiando?, es la consulta que hacen a las autoridades del MEC.
APRENDIZAJE
María Gloria Amarilla, vocera de la organización y estudiante en el Departamento de San Pedro, expresa que “los alumnos no están aprendiendo con las clases virtuales”.
Al inicio de la pandemia, el discurso de autoridades como el ministro de Educación, Eduardo Petta, y el viceministro de Educación Básica, Robert Cano, para con los jóvenes era de que tengan paciencia para adaptarse.
“Aguardamos y sinceramente esperábamos mejoras, pero siete meses después todo sigue igual, nada cambió en las clases”, agregó la líder juvenil.
Otro punto de la encuesta es igualmente la desesperación del alumnado, donde casi uno de cada tres desea volver a la presencialidad debido a estas dificultades, apuntan desde la Unepy.
CHACO
La encuesta, bien distribuida a nivel nacional, también desnuda la situación de chicos y chicas de la Región Occidental. Mariela Felhauer, de Filadelfia, comentó que en su colegio, de gestión privada subvencionada, cuentan hasta con sicólogos que los atienden por el estrés del confinamiento y las clases no presenciales. “Pero en los colegios públicos no cuentan con estas herramientas. Es también preocupante para nosotros la situación de estudiantes indígenas, donde están muy abandonados en su educación”, lamentó.
Aguardamos y esperábamos mejoras, pero 7 meses después todo sigue igual, nada cambió en las clases virtuales. María Gloria Amarilla, vocera de la Unepy.
