Los ensayos realizados por técnicos advierten que al tomar el promedio salarial de los últimos 120 meses lo que ocurrirá es que los futuros jubilados verán disminuidos sus haberes en un porcentaje importante.
Desde el IPS defienden este nuevo sistema de cálculo a razón de que hubo casos en los que los cotizantes aportaban solo con base en el salario mínimo durante gran parte de su vida laboral y solamente en los tres últimos años laborales aportan la base de un salario mayor y con esta maniobra obtienen una jubilación que no condice con su historial de aportes.
Si bien el IPS tiene razón en este punto y debe salir a resguardar la permanencia del sistema de jubilación, nunca se mencionó sobre la cantidad de aportantes que hicieron este tipo de maniobras para mejorar el monto de la jubilación.
Hubiera sido interesante si la previsional nos dijera que el 50% de los que están por jubilarse aumentan sus salarios y aportes en los tres últimos años de vida laboral. Sin embargo, poco o nada se difundió sobre este tipo de datos y, en verdad, no se sabe la cantidad de cotizantes que apelan a este recurso. Puede que sean menos del 10% de todos los aportantes.
En caso de que sean un 10% los cotizantes que aumentan sus aportes al IPS en los últimos tres años, no sé si este porcentaje sea lo suficientemente importante como para poner en peligro las finanzas del IPS y que sea una amenaza para las reservas de la previsional.
También el IPS tiene la potestad de indagar sobre los asegurados que llamativamente aumentan sus aportes cuando ya les falta poco tiempo para jubilarse. Entiendo que la previsional puede solicitar informes a las empresas cuyos empleados aumentan sus ingresos y en consecuencia los aportes al IPS.
Si las autoridades de la previsional hicieran un monitoreo de este tipo de casos, bien se podría detectar si se tratan de salarios reales o simplemente una simulación para aportar más y recibir una mayor jubilación de manera amañada.
Además, hay un alto porcentaje de aportantes que no llegan a reunir los requisitos de edad y años de aportes para acceder a la jubilación.
Un informe dado a conocer por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) muestra que el 57,3% de los cotizantes al Instituto de Previsión Social no alcanzarían los años de aporte para jubilarse ni siquiera a los 65 años.
Esta cifra resulta más que alarmante. Más de la mitad de los que hoy están aportando al IPS por algún motivo dejarán de aportar y, por lo tanto, no completan los requisitos para jubilarse. La previsional es una de las pocas cajas jubilatorias que no devuelve los aportes a la persona que por algún motivo ya no puede aportar y decide retirarse definitivamente del régimen de aporte jubilatorio.
Las autoridades del IPS nunca informaron qué cantidad de personas que aportaron por un determinado tiempo, pero dejaron de hacerlo y perdieron sus derechos.
Tampoco se informa qué cantidad de dinero y qué se hace con estos fondos que fueron aportados por los trabajadores y las patronales.
Si el IPS tuviera que devolver los aportes a los trabajadores que deciden retirarse del régimen jubilatorio, esto si generaría un colapso financiero a la previsional.
Aunque muchos apoyan y acompañan el ajuste en el cálculo para la jubilación, si la previsional no mejora sustancialmente la gestión administrativa, es de esperar que en pocos años vuelvan con el mensaje de que se necesitan hacer nuevos ajustes para evitar el agotamiento de las reservas.
Es imperioso un mejor manejo del dinero de los cotizantes y de los jubilados.