Cuando la pertinaz llovizna ponía en riesgo la realización del espectáculo, nadie se imaginaba que se iba a tener una jornada con una cantidad impresionante de sorpresas.
La primera apareció cuando apenas se llegaba al minuto 8 de la primera etapa, con dos goles de ventaja para el visitante. ¿Sorpresa? De ninguna manera, porque lo de Cerro, no solamente en defensa, sino en todas las líneas, fue calamitoso. Y el visitante no dejó pasar por alto los primeros obsequios que fueron apareciendo.
NO QUEDÓ ATRÁS. Después de esa cómoda victoria parcial de dos a cero, los itaugüeños tampoco quisieron ser menos y regalaron dos goles a los azulgranas, para poner la igualdad. En el primero, Éver Caballero sacó corto y entregó el balón al Polli Benítez, quien marcó el descuento. Pero dos minutos después, otra acción desafortunada de la defensa docista forzó para el gol en contra de Édgar Gamarra.
SE QUEDÓ LUEGO. Así como el visitante, después de pasar al frente con una buena marca de goles, aminoró su marcha, lo de Cerro fue llamativo cuando, antes de cerrarse ese primer tiempo, Vicente Paciello puso nuevamente al frente al equipo itaugüeño.
El Ciclón no tuvo la capacidad suficiente como para noquear a un rival que estaba tambaleante.
GRAN PECADO. Habíamos considerado que Osvaldo Ardiles iba a dar el golpe de timón como para ponerles parches a las grandes lagunas estructurales del equipo que comanda.
El “12" tuvo campo, balón y un adversario que perdía la razón total para una hipotética reacción. Es más, desde los 27 minutos, el chico Rodrigo Burgos cerró su desafortunada gestión al ser expulsado por doble amonestación.
Toda esa situación ventajosa no la aprovechó el 12 de Octubre. Es más, desaprovechó otras situaciones de gol y fue dejando espacios para la levantada del Ciclón. Aunque ya muchos consideraron que no había argumentos para la reacción de los azulgranas, dos jugadas, en dos minutos, fueron letales para los visitantes.
Y Pablito Giménez no dejó escapar esas oportunidades para derrotar al dubitativo arquero Caballero y brindar una gran alegría para los pocos aficionados fieles. Lo de Cerro es sumamente preocupante y le urgen muchos cambios.
¿LA MITAD MÁS UNO?
La respuesta del público en la jornada de anoche, en la Olla, desvirtúa totalmente aquello de que Cerro es la mitad más uno del país. Además, la marca de 25 pagantes aparece como algo histórico en los anales de la institución azulgrana. Se puede creer que es la respuesta al fracaso total de la gestión del equipo y de la dirigencia en este primer campeonato.
Se esperaba una escasa asistencia de aficionados, por el tiempo reinante; pero todos quedamos perplejos por este negro episodio para el club.