Entre las chicanas utilizadas por los González Daher en este periodo está la promovida por la esposa de Ramón, Delcia Karjallo de González, quien solicitó la separación conyugal para quedarse con el cincuenta por ciento de los bienes. En la causa, llamativamente, el juez Walter Mendoza inscribió el pleito.
Además, Carolina González, pareja de Fernando González Karjallo, solicitó la unión de hecho, también con las intenciones de quedarse con el cincuenta por ciento de los bienes del hijo de RGD.
Sobre estas ambas acciones promovidas, la abogada de la familia, Raquel Talavera, alegó que sus defendidas quedarían en la indigencia en caso de que se ejecute el comiso.
Sin embargo, Delcia y su nuera Carolina realizaron varios movimientos millonarios en cuentas bancarias de la familia, justificando la supuesta venta de joyas, pero sin registrar actividades comerciales legales. Por ello, la Fiscalía procesó por lavado de dinero tanto a Delcia como a Carolina y nuevamente a Fernando González Karjallo, por el supuesto retiro de millonarias sumas de dinero de cuentas bancarias que estaban embargadas.