En noviembre de 2022, el Museo de Ciencias (MuCi), un espacio donde convergen arte, tecnología e innovación, abrió su primer espacio, TatakuaLab, ubicado en el predio del Complejo Textilia. MuCi es el futuro Museo de Ciencias del Paraguay, proyectado como una invitación a despertar la curiosidad con experiencias inmersivas e interactivas.
El MuCi tiene el objetivo de fomentar el interés y el amor por el conocimiento en la sociedad paraguaya. “Buscamos inspirar a las personas de todas las edades a través de experiencias interactivas en las ciencias. Esperamos elevar el espíritu humano con el conocimiento como excusa”, cuenta Dave Peery, cofundador y presidente del MuCi. Dave se recibió en Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Brigham Young (BYU). Antes también llevaba la gestión de la fundación Peery, entidad familiar que brinda apoyo a iniciativas de impacto social, tanto en EE. UU. como en otros países.
Dave explica que mientras estaban a la espera de abrir el museo grande, sintieron la necesidad de comenzar a difundir el aprendizaje e interés hacia las ciencias. La apertura del TatuakuaLab fue el primer paso. “Ha servido para desarrollar nuestro equipo, como para dar a conocer el sueño del MuCi. Una vez encaminado el TatakuaLab, sentí que teníamos que ampliar la oferta astronómica”.
De hecho, ya ofrecían observaciones por telescopios, uno de los ejes de mayor interés del público que asiste al MuCi, pero la idea de instalar un planetario, previo al proyecto del gran museo, era importante para el equipo. “Siempre ha sido nuestra intención que la astronomía sea un enfoque clave. Construiremos nuestro planetario, que será el más avanzado de América y el ancla de nuestra oferta al público”, explica Dave.
Lea más notas en www.pausa.com.py
San Cosmos —así bautizaron al planetario— es el segundo espacio del MuCi. Ambos están ubicados en el Complejo Textilia y son una muestra inicial de las experiencias que ofrecerán en tres años, cuando se inaugure su local propio en las cercanías de la Costanera de Asunción. Esta es una gran apuesta e inversión que se está realizando para brindar al público paraguayo una experiencia de clase mundial.
El equipo comenzó a investigar las posibles características de un planetario más pequeño, pero que valiera la inversión y el tiempo. Se preguntaron de qué tamaño sería, qué tipo de proyector o proyectores necesitarían, qué resolución tendría la imagen, si sería portátil o fijo. Una vez valoradas todas estas variantes, encontraron el espacio que podría albergar este sueño, un sitio vacío de aproximadamente 500 m², ubicado en Textilia. “Así que decidimos comprometernos con el proyecto”, confirma Dave.
El espacio de San Cosmos fue diseñado por Luis Ayala, cofundador y arquitecto designado para la construcción del futuro museo de ciencias en la bahía de Asunción.
El espacio de San Cosmos fue diseñado por Luis Ayala, cofundador y arquitecto designado para la construcción del futuro museo de ciencias en la bahía de Asunción. “Luis creó unos maravillosos conceptos para el espacio y fuimos para delante. Ejecutar el proyecto requirió muchísima colaboración y creatividad entre muchas personas. El resultado es un concepto innovador en el Paraguay, que también deviene de mi tarea de visitar museos y planetarios en otros países. Lo veo como una experiencia única en el mundo. Crear San Cosmos ha sido un trabajo de alta complejidad que nos estiró a todos en términos técnicos, creativos, en todo”, agrega Dave.
Lea más notas en www.pausa.com.py
San Cosmos será un complemento del TatakuaLab y ayudará a redondear la oferta a los visitantes, desde este periodo hasta la apertura del museo en la Costanera. “Lo que me encanta de aprender sobre el universo es el sentido de asombro que da, los descubrimientos, los misterios. Esperamos que todos nuestros visitantes experimenten eso”, señala Dave. El planetario se diseñó para todo tipo de público, para que tanto infancias como adultos mayores disfruten de una experiencia satisfactoria y transformadora.
Los shows del planetario
El nuevo espacio se estrena con dos shows. El primero, Al filo de la oscuridad, basado en fulldome (formato de proyección inmersiva con filmes panorámicos en 360 grados dentro de una estructura de domo), fue producido por Evans & Sutherland. Esta propuesta presenta escenas de lugares nunca antes vistos en el universo, reunidos por misiones especiales que culminaron con descubrimientos revolucionarios en 2015. Incluye un vuelo espectacular a través de los grandes acantilados del cometa 67P, una aproximación a las fascinantes luces brillantes en Ceres, y las primeras imágenes cercanas del planeta enano binario Plutón/Caronte y sus lunas.
El segundo show, Secretos del Sol, constituye una mirada íntima al papel que juega el astro rey en el sistema solar. Desde las fuerzas nucleares que se agitan en su corazón hasta las eyecciones de masa material en el espacio circundante. El público podrá rastrear el ciclo de vida del Sol, volver a sus inicios y avanzar en el tiempo hasta su muerte eventual.
Lea más notas en www.pausa.com.py
El planetario estará abierto martes y miércoles de 10.00 a 17.00, y de jueves a domingo de 14.00 a 20.00, a partir del viernes 2 de marzo. Las reservas se pueden realizar a través de la web de MuCi y el aforo es de hasta 25 personas, con shows cada una hora.
Las entradas estarán disponibles en la página muci.org/sancosmos y los costos varían según se adquieran por web o en puerta. El ticket para San Cosmos cuesta G. 35.000 y se puede comprar en combo con TatakuaLab por G. 50.000 vía online; en puerta, el precio es de G. 40.000 y G. 60.000, respectivamente. Además, los grupos escolares o corporativos de 10 personas o más pueden acceder al paquete de visitas grupales.
MuCi nace con el propósito de despertar el amor al conocimiento para crear juntos el futuro que queremos para el país. Se propone ser uno de los mejores museos de ciencia interactivos de la región, y una vez que se construya el predio oficial, el nuevo planetario será el tercero en el mundo con la tecnología de pantalla led curva.
Por Nadia Gómez. Fotografía: Mariella y Luis Ayala.
