El ex agente de los servicios secretos británicos (MI6), de 52 años, ha sido identificado por los medios de EEUU y el Reino Unido como autor del polémico informe sobre los supuestos vínculos de Trump con los ciberataques rusos durante la campaña electoral estadounidense.
Según los medios británicos, Steele está escondido porque teme represalias de Rusia, pero los compañeros que trabajaron con él han destacado que es un profesional muy riguroso, al que se le “puede creer” y que es incapaz de pasar información falsa.
Un ex funcionario del Foreign Office que conoce a Steele desde hace 25 años y es amigo suyo dijo a The Guardian que es “falso” pensar que Steele pudo pasar información sin fundamento.
“La idea de que su trabajo es falso o el trabajo de un vaquero es falsa, totalmente inexacta. Chris es un profesional con experiencia y altamente valorado. No es el tipo de persona que fuera a pasar un cotilleo”, dijo el antiguo funcionario sin revelar su identidad.
“Si él pone algo en un informe –añadió la fuente– es porque cree que es lo suficientemente creíble para que merezca ser considerado. Chris es un tipo muy directo”.
Aunque es poco lo que se sabe de Steele, la prensa afirma que es licenciado por la Universidad inglesa de Cambridge y uno de los más destacados especialistas en Rusia en el MI6, servicio que abandonó en 2009 para dedicarse a la actividad privada. efe