El ex juez y actual ministro de Justicia de Brasil, Sergio Moro, afirmó ayer que los supuestos diálogos divulgados por The Intercept Brasil constituyen un ataque sensacionalista y un revanchismo por su trabajo, y no cuestionan su imparcialidad al frente de la operación Lava Jato.
“Pensé que saliendo de la magistratura y al asumir una posición de ministro, ese revanchismo, esos ataques a mi trabajo como juez que enfrentó la corrupción aplicando la ley, se acabarían. Pero, por lo visto, me equivoqué”, afirmó Moro en una sesión de la Comisión de Constitución y Justicia del Senado.
“Hubo una invasión criminal (de teléfonos celulares) por parte de un grupo organizado con el objetivo de invalidar condenas por corrupción y lavado de dinero u obstruir investigaciones en curso, que pueden afectar a personas poderosas, o simplemente atacar las instituciones, agregó el ministro, quien no reconoce la autenticidad de los mensajes, pero asegura que, de ser verdaderos, no muestran ninguna actitud incorrecta de su parte.
La primera salva de filtraciones de presuntos mensajes de Moro y fiscales de Lava Jato apuntaron a la imparcialidad del ex juez de la mayor operación anticorrupción de la historia de Brasil y sugieren que pudo conspirar para mantener al ex presidente Lula da Silva fuera de la carrera presidencial de 2018. Según The Intercept, los mensajes muestran, entre otros elementos, que los fiscales de Lava Jato hablaban abiertamente sobre su deseo de impedir la victoria electoral del Partido de los Trabajadores (PT) y que el juez Sergio Moro colaboró de forma secreta y antiética con los fiscales de la operación para ayudar a montar la acusación contra Lula.
Lula fue condenado por Moro en 2017 a 9 años y medio de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero; dicha condena fue confirmada por un tribunal de apelaciones y fue detenido en abril de 2018; su pena fue confirmada por una corte superior, pero reducida a 8 años y 10 meses.
Las elecciones fueron ganadas por Jair Bolsonaro, quien designó ministro de Justicia a Moro, convertido en símbolo de lucha contra la impunidad. Moro negó haber tenido contacto alguno con Bolsonaro.
Datos sobre la investigación de la lucha anticorrupción
El ministro de Justicia, Sergio Moro, presentó algunos datos sobre la operación Lava Jato, que destapó una gigantesca trama de corrupción en la estatal Petrobras, que implicaron a decenas de poderosos empresarios y políticos de Brasil y que se extendió a una decenas de países de América Latina y África. “Más de 90 denuncias. 45 sentencias. 291 acusados. 211 condenas. 298 pedidos de prisiones cautelares y 207 fueron aceptadas y en todos los casos con pruebas muy sólidas, en las que hasta aparecían millonarias cuentas bancarias en el exterior”, declaró. También la operación resultó en decenas de acuerdos de colaboración judicial y permitió hasta ahora, recuperar para el Estado cerca de USD 600 millones.