Batista, declarado prófugo el pasado jueves, anunció la víspera desde el aeropuerto de Nueva York que regresaría a Brasil para colaborar en la investigación, por lo que la Policía Federal ya lo esperaba en el aeropuerto internacional de Río de Janeiro.
El empresario, acusado del pago de comisiones ilegales por unos 16,5 millones de dólares al exgobernador de Río de Janeiro Sergio Cabral para adjudicarse contratos del gobierno regional, fue detenido inmediatamente tras bajar de la escalerilla del avión y conducido a la sede la Policía Federal.