17 nov. 2024

“El matrimonio no tiene por qué ser rutinario ni aburrido”

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Ejemplar. Mercé Scude y Pep Borrell llevan unidos en matrimonio 35 años, con hijos y nietos.

ANDRES CATALAN

Marisol Ramírez

Pep Borrell Vilanova y Mercé Scude forman un matrimonio próspero que ya lleva muchas décadas de vigencia. Son padres de cinco hijos y son abuelos de cinco nietos, de entre un mes y cinco años.

Hablar sobre la importancia de una agradable convivencia y perdurabilidad del matrimonio es una tarea que fluye para Pep, médico odontólogo, conferenciante y autor de Bailar en la Cocina, el secreto que los matrimonios que disfrutan. El libro se encuentra a la venta en Paraguay en la librería Atenas.

El escritor empezó a dar charlas sobre el matrimonio a raíz de la pandemia, y luego esta tarea se convirtió en un libro. Más allá de “dar consejos” a sus hijos y nietos, considera que la clave para inspirar está en la congruencia, es decir, “lo que hay que hacer es vivirlos, muy claros. Dar el ejemplo de vida”.

Afirma que no les da sermones, pero que ellos mismos a veces le piden sugerencias. “Convocan a amigos suyos para montar comidas en casa y que sus amigos, con las novias o con quien sea hagan todas las preguntas que quieran sobre el matrimonio”, refiere.

La pareja exhibe a través de las palabras de ambos una fortaleza sólida y saludable. Confiesan coincidir en los temas importantes de la vida, sobre todo, aquellos que tienen que ver con los valores. “Creo que el éxito de nuestro matrimonio ha sido pasarla bien hablar mucho y compartir la fe”, explica.

Comparten que se conocieron muy jóvenes, terminando el bachillerato, “veraneando”. La relación de noviazgo duró siete años, en tanto ambos terminaban sus carreras. Se casaron cuando ambos tenían 25 años. “Sabíamos que sería un noviazgo largo”, confiesan.

Entre los elementos que relatan, y que influyen en que el matrimonio que lleva hace 35 años sea exitoso, dejan ver que en ambos existe madurez y buena gestión emocional.

El escritor reflexiona que el noviazgo no es una etapa para aprender valores o capacidades individuales, sino para conocerse mutuamente. Lo individual se recibe en el seno familiar”, expresa.

Relatan que entre ellos no hay enfados “muy importantes”, y que si hay enojos es por cosas superficiales. Ante la pregunta de qué hacen para superar esos momentos de enojo, es decir, cuando la emoción gana a la razón, Pep aconseja dejar pasar esa emoción negativa y volver a conversar en la calma.

“Hay un dicho que dice no se vayan a dormir sin hacer las paces, pero a veces esto es difícil, porque hay enojos y enojos. Hay gente que se enoja más, hay gente que se enoja menos”, manifiesta.

Para Pep es muy importante distinguir el sentimiento de la voluntad de amar. “El sentimiento va y viene, lo que hay que hacer es trabajar el amor para que vuelva el sentimiento y eso se hace con detalles, desde los más pequeños”, recomienda.

El escritor cree firmemente que “el matrimonio que se lo pasa bien, no tiene porque ser rutinario ni aburrido, ni de esos que se aguantan por aguantar obligatoriamente”.

AMOR VS. ENAMORAMIENTO

En el libro Bailar en la cocina, Pep Borrell Vilanova se refiere al matrimonio para un target de parejas de novios y matrimonios de cualquier edad.

Para Borrel es imprescindible entender que “el enamoramiento, que es puro sentimiento, llega, eso no es malo, pero no es amor. Eso, hay que pasarlo por la cabeza, ahí está el tema. Uno tiene que pensar que tipo de hombre/mujer me gusta, cuando uno sabe eso, va conociendo personas, se toma un café, se sale a cenar es un proceso hasta llegar al matrimonio”.

En cuanto al tiempo que recomienda para un noviazgo señala que para cada persona y pareja eso es diferente, pero que en general, debería tomarse como mínimo todo un año para ver a la persona en todo tipo de situaciones, sobre todo, “cómo actúa en las malas, porque en general, el noviazgo tiende a ser momentos gratos, pero es importante ver lo malo del otro, para poder decidir si esa persona es con quien quiero compartir la vida, porque cuando me caso, es para compartir los buenos y malos momentos”.

También subrayó que se debe tener cuidado con las “banderas rojas” que se ven en el noviazgo y hacerles caso, no creer que la persona va a cambiar en el matrimonio.

Acerca de lo que ocurre con las parejas cuando pasan los años, y se lleva mucho tiempo de convivencia en la relación, y se percibe que “el sentimiento se esfumó”, es ahí cuando debe “trabajarse el amor, hay que volver atrás y recordar que los unió cuando se empezaron a gustar”, detalla.

LO POSITIVO

¿Qué beneficios se pueden encontrar en el compromiso, el matrimonio, viviendo en pareja? Para Pep y Mercé éstos son la tranquilidad, felicidad, amar y ser amado.

“La felicidad no es solo amar. El amor es compartir, amar y ser amado. Cuando sabes que hay alguien que te quiere, te esfuerzas en querer y eso se respira en casa, los hijos lo ven, lo absorben y brinda mucha estabilidad en todos los sentidos, emocional, psicológico, incluso desde un punto de vista económico”, reflexiona el autor.

“A mí no me da ningún reparo decir que estoy muy enamorado de mi mujer. Nunca la critico, siempre la admiro, siempre hablo bien de ella, aunque esté enfadado”, puntualizó.

En tanto que Mercé reflexiona: “Hemos vivido siempre con mucha alegría, mucho optimismo. Nos hemos enfadado muy poco, pensamos igual en casi todo. También es importante cada quien tener su individualidad, independencia”.

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Familia próspera. Pep y Mercé tienen una gran familia con valores fundados en el amor y otros valores que favorecen a la estabilidad.

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