Como una postal vintage, de tono rústico y opaco, pero con toda su originalidad. Así luce el Oratorio Nuestra Señora de la Asunción y Panteón Nacional de los Héroes, tras lo que fue –aseguran– su “primera restauración”. Las anteriores fueron “reparaciones”, dice el Ing. Guillermo Barrail, de la empresa contratista que tuvo a su cargo los últimos tres años de remozamiento estructural.
En la víspera de su reapertura, la Secretaría Nacional de Cultura lo declaró Patrimonio Nacional Cultural a través de la resolución Nº 593/2018. A contrarreloj, los obreros sacaban ayer las chapas perimetrales y limpiaban el sitio; otros colocaban panes de césped y flores para hermosear el jardín de la Plaza de los Héroes.
Recuperado. Desde su inauguración, en 1936, y contra toda indicación técnica este monumento fue revestido con diversa y numerosa cantidad de pintura y enduido, a modo de mantenimiento. Todo esto terminó dañando seriamente su estructura “con la disgregación de revoques y molduras”.
Liberado de andamios y tejidos protectores, el Panteón deja ver ahora su “cara” original que refleja los elementos con que se hizo: adobe y piedras. En esencia, no se levantó para que se pinte con acrílico, sino “para que respire”, indica el Ing. Barrail.
Las continuas reparaciones a las que fue sometido, tanto dentro como fuera, a base de pintura de todo tipo y color fueron erosionando ciertos sectores. Al punto que se verificó una importante fisura que ponía en riesgo de colapso la bóveda principal.
“La ciudadanía va a poder ver el Panteón con la superficie como era originalmente: con el revoque símil piedra”, explica Ana Butrelov, jefa del Departamento de Parques y Monumentos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Retiraron todas las capas de pintura: en algunos puntos había once colores, en otros cinco. Donde había deterioro, “se hizo la reposición del revoque” con los mismos componentes.
Adentro del monumento hay una variedad de colores (blanco, beige, rosado, etc.) que fueron acumulándose en su historia. “En el interior se ven diferentes tonos del acabado original. En todas las zonas donde están decoradas; el friso del Panteón está con un color más oscuro”, precisa.
Butrelov señala que en abril del 2015 arrancaron con los trabajos de intervención. Las primeras tareas incluían la consolidación de molduras y fisuras, el retiro de la pintura de la cornisa para arriba. En tanto que, en una segunda fase, se trabajó en el “apuntalamiento” de la bóveda a raíz de la grietas detectadas.
“Para la consolidación se utilizó fibras de carbono, muchas de ellas fueron traídas de Italia”, menciona sin obviar los giros de la vida: El que diseñó este monumento en 1863 fue el arquitecto italiano Alejandro Ravizza. “Ese trabajo de consolidación no se ve, pero es muy importante”, insiste sobre las láminas de fibra que “están arriostradas” también en la parte de los domos y arcos.
La contratista devolverá hoy a sus sitios las estatuas restauradas que escoltan el mausoleo en su interior. Mañana restituirán las urnas con los restos de los héroes en el marco de un solemne acto cívico-militar
10.000 millones de guaraníes costó toda la restauración
4.200 tejas fueron creadas para cubrir la cúpula.