CIUDAD DEL VATICANO
El papa Francisco decidió reemplazar al secretario de Estado, número dos del Vaticano, Tarcisio Bertone, cuya gestión de la curia fue con frecuencia contestada, indicaron fuentes vaticanas citadas ayer por la prensa italiana.
Tarcisio Bertone, de 78 años, fue desde 1986 el hombre de confianza del ahora papa emérito Benedicto XVI, al que fue fiel durante los escándalos que sacudieron su pontificado. Este salesiano fue acusado de errores de gestión y de desafortunadas elecciones, según una parte de los documentos confidenciales del Vaticano, publicados en 2012 en el escándalo VatiLeaks.
candidatos. Según el Corriere della Sera, Francisco podría anunciar a partir hoy la marcha de Bertone e incluso el nombre de su sustituto, que asumiría las funciones a mediados de octubre. El nombramiento en julio por el Papa de una experta en comunicaciones, la católica ítalo-marroquí Francesca Immacolata Chauqui, de 32 años, sin consultar a la Secretaría de Estado provocó el descontento de Bertone.
Chauqui, miembro de una comisión de laicos encargada de examinar la transparencia financiera y administrativa del Vaticano, tendría también contactos con Gianluigi Nuzzi, el periodista italiano al origen del escándalo VatiLeaks, y había enviado tuits críticos sobre la curia, en los que calificaba a Bertone de “personaje corrupto”.
Dos candidatos, ambos italianos, podrían sustituir a Bertone. El nuncio en Venezuela, el arzobispo Pietro Parolin, y el gobernador de la Ciudad del Vaticano, Giuseppe Bertello. El cardenal Bertone podría continuar como camarlengo, puesto clave para administrar la transición tras el fallecimiento o la dimisión de un Papa.
habla por teléfonO. El Papa llamó por teléfono a uno de los jóvenes procedente de una de las conocidas como “villas miseria” de Buenos Aires y a quien lavó los pies en 2008, cuando era arzobispo de la capital argentina, durante la misa del Jueves Santo.
El portal italiano de análisis sobre América Latina Terre d’America se hace eco de las declaraciones que publicó el joven en una red social y en las que explica la llamada del Papa. “Hola Cuervo ¿Cómo estás?”, preguntó el pontífice al joven Juan José, dirigiéndose a él por su apodo, cuando éste respondió al teléfono.
El sábado Francisco recibió en Vaticano al sacerdote argentino José María di Paola, un viejo conocido desde sus tiempos en Buenos Aires, y quien vive en “la villa” (barrio marginal) de La Cárcova.
Di Paola, conocido popularmente como padre Pepe, entregó a Francisco dos cartas, una de las cuales era precisamente del Cuervo.
Juan José es uno de los que recibió asistencia en el Hogar de Cristo, centro creado con ayuda de la Iglesia para brindar ayuda y apoyo a los jóvenes con problemas de drogadicción, que fueron víctimas de abusos sexuales, desempleado o que se encuentran sin trabajo.