17 abr. 2025

El Parque Ortiz Guerrero, la mayor atracción de Villarrica

Juan Gayoso

Encanto.  El área verde reúne elementos  del aporte cultural del poeta guaireño, y frondosos árboles para el descanso.

Encanto. El área verde reúne elementos del aporte cultural del poeta guaireño, y frondosos árboles para el descanso.

VILLARRICA

En Villarrica, el Parque Manuel Ortiz Guerrero constituye una de las principales atracciones para las personas que visitan la capital del Departamento del Guairá. El sitio es el primero en albergar a los pasajeros de otros lares.

En el lugar caracterizado por la laguna bañada por el mítico Ykua Pytã, se encuentra la tumba del bardo de la pluma culta, Manuel Ortiz Guerrero, quien en sus versos expresara su deseo de descansar eternamente bajo alas del Panambí Verá, cuyo monumento también se halla en ese espacio público, que se encuentra en la zona del microcentro de la ciudad.

De los datos encontrados del libro El Guairá y su aporte a la cultura, escrito por el profesor Artemio Franco Preda, “la historia del Ykua Pytã comienza en la posguerra de la Triple Alianza, cuando en 1876 hubo una prolongada sequía, y la Junta Económica Administrativa dispuso la excavación de un pozo de agua potable, en el sitio ocupado hoy día por el estadio. Como es zona de nacientes, el agua fluyó y sigue sin pausas”.

Fue el intendente municipal Silvio Codas, en 1936, quien decidió que el Ykua Pytã lleve la denominación del poeta Manuel Ortiz Guerrero, fallecido en 1933. Más adelante el intendente Gilberto Careaga, encomendó el cultivo de árboles, especies que actualmente ofrecen una sombra extensa para guarecerse del calor.

El lugar también acoge diariamente a vecinos de la ciudad que acuden para un reparador descanso con la familia y los amigos, y realizar las recomendadas caminatas aprovechando un paseo peatonal que circunda la laguna.

El Parque Ortiz Guerrero, otrora Ykua Pytã, es el rincón que inspirara al bohemio a escribir los versos de Ne rendape ajú, Panambí Verá, India, Loca, La prometida, y muchas otras poesías.

De hecho, visitar Villarrica, es llegar primeramente al parque Manuel Ortiz Guerrero.