El portavoz del Departamento de Defensa de EEUU, John Kirby, sostuvo en una rueda de prensa que “claramente” el ataque ruso contra la planta fue violento.
Agregó que el Pentágono no puede disputar las informaciones que indican que Rusia se ha hecho con el control de Zaporiyia.
“Respecto a las condiciones allí, nuestro conocimiento es imperfecto, pero entendemos que no hubo ninguna filtración de material radiactivo”, señaló Kirby.
El portavoz hizo estas declaraciones después que la agencia nuclear de la ONU informara de que el ataque contra la instalación no provocó escapes radiactivos, pese a que un edificio llegó a incendiarse como consecuencia de los ataques.
El portavoz estadounidense opinó que si la situación hubiera evolucionado de otra manera, podría haberse registrado “mucho más daño y destrucción a la gente de Ucrania y a lo mejor a los países vecinos”.
En otra rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, opinó por su parte que el ataque ruso contra la planta fue “el colmo de la irresponsabilidad” e instó al Kremlin a “cesar sus operaciones en torno a la infraestructura nuclear” en Ucrania.
En la ONU, Estados Unidos acusó este viernes a Rusia de poner en peligro a Europa con su “imprudente” ataque a la citada central nuclear en Ucrania y exigió a Moscú garantías de que no volverá a darse un episodio similar.
“Por la gracia de Dios, anoche el mundo evitó por poco una catástrofe nuclear”, declaró la embajadora estadounidense ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, durante una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad para discutir el incidente en la planta de Zaporiyia.